Metrópolis, la joya del cine mudo que el alemán Fritz Lang rodó en 1927, vuelve al Teatro Principal y lo hace en una coproducción del Centro Dramático de Aragón y Teatro Che y Moche, que cumple su décimo aniversario y lleva a la escena la obra que ya presentó en 1997.

Esta pieza, que se estrena esta noche, a las 22.00 horas, es una "superproducción aragonesa" en la que se aúnan la música original y en directo, la danza y el teatro a través de más de 50 personas entre el escenario y el foso, donde se encuentra la orquesta Enigma. Metrópolis está ambientada en el siglo XXI donde los trabajos los realizan máquinas manejadas por un ejército de esclavos, mientras que la clase dominante vive en la superficie. Estos no son conscientes de comportarse como tiranos hasta que un día, el hijo del dueño de la ciudad ve a una bella joven y, en su búsqueda, descubre las miserias de la Metrópolis.

Joaquín Murillo, director de la obra, define la producción como un "autohomenaje" que se enmarca en la tradición expresionista de la compañía y a una "manera de contar fiel a nosotros mismos". El director de Che y Moche quiso contar para la obra con "la mayor cantidad de creadores y que, además, fueran de los mejores, una forma de trabajar como la de la vanguardia de principios de siglo". Por eso, Víctor Rebullida compuso la música especialmente para la obra; Enigma la interpreta en directo; y Elia Lozano preparó la coreografía.

Murillo ya dirigió en 1997 su primera Metrópolis, que tuvo una "gran acogida por parte del público". La versión de 2007 tiene "muchas y pocas diferencias y coincidencias", sin embargo, no se trata de "mejorar la obra sino de aportar cosas pero que en ese momento no sabíamos o no podíamos hacer", como es el caso de la música original y en directo. "El punto de partida era fantástico pero en estos diez años todos hemos aprendido a utilizar mejor el lenguaje y hemos cristalizado nuestras carreras".

En la presentación del espectáculo estuvieron todos los sectores implicados en la superproducción. Javier Brun, director del CDA, Víctor Rebullida, compositor; Elia Lozano, coreógrafa, y Juan José Olives, director del grupo Enigma.

El trabajo de Elia Lozano consistió en poner imaginación y esencia a una música porque la danza tiene una importancia "vital" dentro del espectáculo. "He intentado buscar la belleza, el horror, la estética, riesgo y además un compromiso con nuestro medio a través del movimiento y el cuerpo".

Juan José Olives puso de manifiesto que con Metrópolis se logra sacar a la orquesta fuera del Auditorio y lo harán en las ocho funciones en directo. Olives definió la obra como "un espectáculo completo en el que se reúnen diferentes grupos y entidades con un alto nivel de calidad".

El autor, Víctor Rebullida, ha estado trabajando un año en la obra, "un año de composición, duro pero muy agradable" puesto que se ha tratado de buscar "ideas comunes" con Joaquín Murillo para sacar a la luz "el trabajo musical más importante de mi carrera porque como proyecto es el más grande". Un proyecto que busca que, además de en Zaragoza, pueda verse en otras ciudades.