La Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE) prevé, ante las lluvias caídas en la parte alta de la cuenca, una nueva crecida del río para este fin de semana, aunque se espera que los caudales se sitúen por debajo de los niveles de los últimos días.
La CHE ha informado hoy de la última actualización de las previsiones de aumento y recuperación de caudales en las cabeceras de los ríos de la margen izquierda de la Cuenca Alta (desde el Nela, Jerea y Omecillo, en Burgos, al Zadorra y Bayas, en Álava, y el Arga, Ega e Irati, en Navarra), además de en el propio Eje del Ebro, donde los registros de lluvia se han situado por debajo del anterior episodio.
Los aumentos de caudales han sido más moderados en los cauces de la Comunidad Foral de Navarra, tanto en el río Ega como en el Arga (en Funes, el máximo se alcanzará esta tarde con menos de 500 metros cúbicos por segundo, por debajo de los 600 del pasado miércoles).
Sin embargo, en la zona burgalesa de la cuenca, este episodio conlleva un aumento ligeramente superior con un máximo de 207 metros cúbicos por segundo en el río Trueba, a su paso por Medina de Pomar, y de 112 metros cúbicos por segundo en el Nela, en Villarcayo.
En todos los casos se prevé que el descenso de los caudales se registre de forma más rápida que en el anterior episodio, dado que los procesos de fusión nival han sido inferiores.
Por ello, la CHE ha dado aviso a los servicios de Protección Civil de las Comunidades Autónomas donde se están registrando estos aumentos de caudal. En el resto de los cauces, las crecidas están siendo moderadas, muy por debajo de los niveles de avenida extraordinaria.
Por las aportaciones de los afluentes de la margen izquierda, en Castejón (Navarra) se prevé alcanzar un máximo en torno a 1.300-1.400 metros cúbicos por segundo durante el mediodía de mañana.
En Zaragoza también se prevé una punta de caudal máximo en torno a los 1.050-1.200 metros cúbicos por segundo, durante la madrugada del domingo al lunes, inferior a lo registrado esta madrugada (1.199 metros cúbicos por segundo).
A pesar de estas recuperaciones de caudal, la cuenca continúa en situación de sequía, debido a que las precipitaciones se han concentrado en la parte alta sin beneficiar a los grandes sistemas de las márgenes izquierda y derecha del Ebro.
Por su parte, en la cuenca del río Irati, en Navarra, el embalse de Itoiz ha alcanzado el límite previsto para iniciar la nueva fase del Plan de Puesta en Carga del embalse que consiste en mantenerse en el entorno de esta cota los próximos dos meses.
En la cuenca del Zadorra, aunque ayer se cerró el desembalse desde Urrúnaga (en el río Santa Engracia), hoy aumentará el vertido desde Ullívarri, iniciado el pasado martes, 25 de marzo, de 20 a 30 metros cúbicos por segundo, manteniéndose hasta que se equilibren las entradas por las salidas.
