«El dolor que no se expresa acaba pudriendo el corazón». Con esta frase de Shakespeare, el presidente de la asociación por la Recuperación de la Memoria Histórica (ARMHA), Enrique Gómez, reivindicó la necesidad de que se haga justicia y paliar el sufrimiento, todavía silenciado, de las víctimas del franquismo. El Ayuntamiento de Zaragoza, con la colaboración de esta entidad y el departamento de Turismo del Gobierno de Aragón, ha dado un paso más para difundir esta cara de la historia del país, esta vez, a través de la cultura. Para ello, han organizado la primera edición de La imagen de la Memoria, que durará hasta el domingo, en la que se mostrará el dolor de las víctimas de la dictadura a través del cine y del teatro.

Dentro de la iniciativa, se encuentran actividades como la proyección del documental Ladrones de vidas, en la Filmoteca de Zaragoza, de la película La voz dormida, en el Teatro del Mercado, un cuentacuentos bajo el título Mi hermano es un pez y la exposición Una utopía necesaria, en La Pantera Rosa, entre otras.

Por su parte, el director de Turismo del Gobierno de Aragón, Jorge Marqueta, apuntó que la memoria «es un derecho inalienable» que en España no se tiene porque «no se sabe nada, no se cuenta». Para poder superarlo, Marqueta indicó que «hay que juzgarlo y no callar». A lo que Gómez añadió que es necesario «para que una guerra así no se vuelva a producir». Gómez también dijo que hay que hablar «de valores democráticos y de respeto que todavía no están bien asentados en la sociedad», exigió.

Esta iniciativa es una de las cuatro líneas de actuación en las que trabaja el consistorio para la recuperación de la memoria histórica y es la primera que se ejecuta. Entre ellas, queda pendiente el programa de investigación sobre asesinados y represaliados y la crear un portal web con información sobre las víctimas.