El puerto de Monrepós registró ayer una circulación abundante pero fluida, según informó el centro territorial de control de Tráfico en Aragón. La conexión de 300 metros que ha permitido solventar el hundimiento de la carretera en el puerto de Santa Bárbara mostró su eficacia, y pese a la limitación de velocidad a 50 kilómetros por hora no se registraron atascos.
La noticia de la reapertura de la N-330 hacia el Pirineo, tras el corrimiento de tierras de la semana pasada, hizo que muchos conductores que deciden pasar este puente de San Jorge en la montaña volviesen a optar por esta vía. De hecho, ya anteayer por la tarde fueron muchos quienes la usaron, y la confusión entre la hora de la convocatoria de prensa (a las 15.00 horas) y la de reapertura, una hora después, acumuló una buena cantidad de vehículos esperando.
Tras el deslizamiento de tierras y el hundimiento de una parte de la carretera el viernes, 13 de abril, Fomento mantuvo a equipos de 20 personas trabajando las 24 horas desde el día siguiente para conseguir reabrir en menos de una semana la vía, con un tramo provisional, mientras estudia una solución definitiva.
