El Centro de Investigación y Tecnología Agroalimentaria de Aragón (CITA), del Departamento de Innovación, Investigación y Universidad del Gobierno de Aragón, ha puesto en marcha una investigación pionera en el control de teosinte en el cultivo del maíz.

El teosinte es una gramínea botánicamente cercana al maíz, considerada su ancestro, lo que dificulta su control por mediación de productos químicos y merma la producción del maíz puesto que compite por la luz y el agua.

El proyecto de investigación del CITA, "Aparición de una nueva mala hierba en el cultivo del maíz en el valle del Ebro: el teosinte. Caracterización biológica y estudio de métodos para su control", está financiado por el Ministerio de Economía y Competitividad y los trabajos se realizan en colaboración con el Centro de Sanidad y Certificación Vegetal del Gobierno de Aragón y la Universidad de Lérida, ha informado hoy el ejecutivo aragonés.

En Aragón, la zona de los Monegros es la más afectada por teosinte, si bien los investigadores están cuantificando la extensión y el grado de intensidad de la infestación en la Comunidad y en Cataluña para conocer la magnitud real del problema.

Asimismo, se está realizando el estudio genético de las diferentes poblaciones encontradas en ambas comunidades para determinar si es una sola subespecie o varias, e intentar situar el área de origen.

También trabajan en el estudio de características biológicas de las semillas para establecer la profundidad máxima desde la cual son capaces de emerger, su supervivencia en el suelo, para conocer las fechas de maduración, o el número de semillas por planta.

Los investigadores Alicia Cirujeda y Gabriel Pardos, de la Unidad de Sanidad Vegetal del CITA, son los responsables del proyecto, el único que se está realizando en España, y consideran fundamentales estos análisis, ya que se desconoce el comportamiento biológico del teosinte en las condiciones locales.

Los diferentes métodos de control de esta mala hierba son el principal objetivo de este proyecto, que estudia el efecto de la rotación de los principales cultivos del valle del Ebro sobre el teosinte (alfalfa o guisante), el efecto del laboreo sobre la emergencia de esta planta y su sensibilidad frente a los herbicidas antigramíneas más frecuentes.

Próximamente se iniciará otra de las fases del proyecto en colaboración con la Unidad de Producción y Sanidad Animal del CITA para estudiar la supervivencia de las semillas después de su ingesta cuando las ovejas pastorean los rastrojos de campos de maíz tras la cosecha.

De esta manera se pretende conocer si el pastoreo de los rastrojos infestados con teosinte puede dispersar las semillas de un campo a otro.

Las actividades de divulgación son parte fundamental de este estudio, de forma que los investigadores y los técnicos del Centro de Sanidad y Certificación Vegetal del Gobierno de Aragón están llevando a cabo reuniones con agricultores y maquinistas de cosechadoras para conseguir una máxima concienciación del problema.