El Centro de Investigación y Tecnología Agroalimentaria de Aragón (CITA) trabaja para garantizar el éxito de un árbol frutal antes de plantarlo, en un proyecto multidisciplinar que ahonda en la compatibilidad de los injertos.

El objetivo es profundizar en la identificación y caracterización de los mecanismos genéticos que regulan la compatibilidad para poder detectar, en una fase temprana, el futuro comportamiento al injerto de una determinada combinación, ha explicado el Departamento de Innovación, Investigación y Universidad del Gobierno de Aragón en una nota de prensa.

La investigación propone avanzar en el desarrollo de herramientas adecuadas para el diseño de marcadores moleculares que permitan su utilización en selección asistida.

Y es que, si se producen problemas de incompatibilidad de injerto, la combinación frutal se debilita y los árboles acaban muriendo, lo que genera pérdidas importantes.

Problemas que se dan especialmente en el caso de los albaricoqueros, "cuya situación actual hace necesaria la introducción de otros patrones que salven los defectos de los actualmente vigentes, como falta de compatibilidad, excesivo vigor y deficiente propagación vegetativa", han destacado las mismas fuentes.

En este sentido, desde el Gobierno aragonés han destacado que este estudio permitirá acelerar y simplificar el proceso de selección de patrones en los programas de mejora genética "ofreciendo al sector agrícola alternativas al material frutal actualmente en uso".

El proyecto, denominado "Caracterización de los mecanismos genéticos y evaluación fenotípica de la compatibilidad de injerto en especies frutales", está financiado por el Instituto Nacional de Investigación y Tecnología Agraria y Alimentaria.

En el estudio participan, además de los investigadores del CITA, expertos de la Universidad de Clemson (Estados Unidos), de la Facultad de Ciencias de Dinamarca y de la Universidad de Múnich (Alemania).