El tráfico en la avenida de Navarra, cortado como consecuencia de la fuerte tormenta que ha descargado a mitad de la tarde sobre Zaragoza, ya está abierto en ambos sentidos, aunque con una gran fila de coches en sentido entrada a la ciudad, explican desde el Ayuntamiento de Zaragoza.

El tráfico es muy lento en casi toda la ciudad, afectada por más de 150 incidencias provocadas por la caída de árboles, ramas y cables de tendido eléctrico, por contenedores que han salido volando debido a las fortísimas rachas de viento y por la imposibilidad de las alcantarillas de tragar el torrencial volumen de agua, ya que han llegado a caer hasta 17 litros por metro cuadrado en veinte minutos.

Hay afecciones en el Pilar, en el museo Fluvial, las Termas y El Foro, además de muchos garajes y bajeras inundados.

Los Bomberos van atendiendo los avisos conforme a los habituales criterios de priorización, y por eso desde el Ayuntamiento se ruega paciencia a los conductores y a los vecinos, a quienes también han dado las gracias por su colaboración en las tareas de retirada de árboles y troncos.

El tranvía sigue cortado en la mayor parte de su recorrido, puesto que solo funciona en Valdespartera después de que varias ramas de gran tamaño cayeran sobre la catenaria en la plaza de San Francisco, y se han registrado varias incidencias eléctricas debido a cables rotos, que se han comunicado a las empresas para que actúen en consecuencia.

En la carretera de Movera a Pastriz hay árboles y postes caídos o a punto de caer que dificultan el tráfico. El autobús no puede pasar. Se pide precaución a los conductores.