El Colegio Oficial de Médicos de España ha concluido que el polémico folleto sobre drogas realizado por Consumo Conciencia y financiado por el Ayuntamiento de Zaragoza es «trivial» e «irresponsable». Después de haber analizado su contenido, a petición de la delegación de Zaragoza, destaca su «desinformación» y la «interesada equiparación» de las drogas con determinadas sustancias permitidas.
Este documento, que incluye consejos sobre cómo consumir y cuya publicación fue denunciada por el PP el pasado mes de febrero, generó grandes críticas de las asociaciones y entidades contra la drogadicción, que aseguraron que incorporar recomendaciones para meterse una raya de cocaína o speed no era lo más apropiado. Aunque los grupos municipales solicitaron su retirada inmediata al considerar que fomentaba el consumo de sustancias ilegales, el Gobierno de la ciudad lo descartó. Bajo el título Drogas, el mundo, el barrio y financiada por la junta municipal del Casco Histórico (destinó 1.966 euros de su presupuesto), esta guía generó tensos debates en el Ayuntamiento de Zaragoza, las Cortes de Aragón e incluso en el Congreso de los Diputados.
Entre las críticas, además del cuestionado contenido, destacaban dos que apuntaban directamente a la gestión del ayuntamiento, a quien reprocharon no haber revisado la información antes de su publicación, cuando lleva su sello y dinero público, y por no haber definido correctamente el lector al que iba dirigido. Los folletos se encontraban al alcance de cualquiera en las oficinas del Plan Integral del Casco Histórico (PICH).
La comisión deontológica del Colegio de Médicos concluye que la publicación hace una «aproximación trivial e incluso irresponsable al consumo de drogas». Añade que «no solo se minimizan los efectos adictivos de las drogas, sino que se omiten las consecuencias orgánicas, psíquicas, personales, familiares y sociales».
CRÍTICAS / Además, indica que «llama la atención la desinformada e interesada equiparación de determinadas sustancias legales», como pueden ser el alcohol o el tabaco, con «drogas de alta incidencia de mortalidad e incluso letalidad».
El PP fue el primer partido en solicitar la retirada de este folleto. El resto de formaciones tardaron poco en unirse a la petición de los conservadores. También el consejero de Presidencia de la DGA, Vicente Guillén, consideró por su parte que contenía «material inadecuado».
Desde el Gobierno de Zaragoza en Común (ZeC) defendieron en todo momento la publicación. El alcalde, Pedro Santisteve, negó «radicalmente» que fomentase el consumo de drogas y aseguró que se trataba de una herramienta de trabajo dirigida a trabajadores sociales y educadores, no a un «público joven». El responsable de la publicación, Javier Sánchez, declaró que el PP estaba utilizando este folleto como «arma arrojadiza para atacar a ZeC» y negó que promocionara el consumo de estupefacientes.
