Los atascos de la intersección de la avenida Pirineos con Arquitecto La Figuera y la avenida Ranillas, junto a La Chimenea, están desatando las protestas de los automovilistas, que se quejan de que los tiempos de espera ante la luz en rojo se eternizan a causa de la prioridad semafórica del tranvía.

"Lo normal son seis minutos. Pero hemos llegado a cronometrar hasta doce minutos de espera si se cruzan dos convoyes en la parada de La Chimenea", asegura el presidente de la Asociación de Vecinos del Arrabal, Rafael Tejedor. En esta organización llevan tiempo recibiendo numerosas quejas porque "desde que pusieron el tranvía, la regulación semafórica de este cruce es un caos", afirma.

Tejedor también considera que la señalización horizontal "es otro caos". En la salida del Arrabal hacia la avenida Pirineos, "el 80 o 90% de los coches quieren girar hacia la margen derecha, pero solo lo permite un carril de los tres que hay, y los atascos llegan a veces hasta el puente de Piedra.

Estos vehículos taponan también la entrada al barrio por la calle Palencia. Aunque tengas el semáforo en verde no puedes girar", explica. "Y estas retenciones afectan también a las frecuencias de las líneas 28, 36 y 50 del bus urbano".

Ante estos problemas, la asociación de vecinos decidió llevar el asunto al último pleno de la junta de distrito del Rabal, celebrado a finales de octubre. Ahí solicitaron que un técnico de Movilidad acudiese a la zona para estudiar alternativas, "pero no sabemos si lo han enviado".

En el Ayuntamiento de Zaragoza aseguran que esta petición ya ha sido atendida. Reconocen que es "la regulación de esta intersección es compleja, ya que el tranvía atraviesa al bies desde el puente Santiago" este cruce múltiple para que haya "un margen suficiente para realizar todos los giros con seguridad". Desde Movilidad se establecieron "dos prioridades" para regular este tramo: que a los peatones les de tiempo a cruzar la amplia avenida Pirineos, y asegurarse de que la plataforma está despejada de coches cuando pasa el tranvía.

Sin embargo, lamenta Tejedor, "no entendemos por qué con este ciclo semafórico hay momentos en que todo el mundo está parado. Nos parece muy bien que el tranvía tenga prioridad semafórica, pero es la misma que en la plaza Paraíso, y ahí no ocurren estos problemas".

En el ayuntamiento aseguran que el actual sistema semafórico "permite conocer muchos parámetros" que los técnicos de Movilidad han analizado para acometer diversos cambios en este tramo. "No sabemos si se logrará la perfección algún día, pero se trabaja en esta zona constantemente, y las esperas ya no son tan largas", afirman.