La plantilla del tranvía de Zaragoza aprobó ayer secundar los paros parciales anunciados, que serán del 13 de marzo al 7 de abril, de 8.00 a 10.00 horas y de 19.00 a 21.00 horas. Lo hacen como respuesta al «incumplimiento» por parte de la operadora de Los Tranvías del acuerdo alcanzado en el Servicio Aragonés de Mediación y Arbitraje (SAMA) el pasado mes de octubre, que evitó la huelga prevista para las fiestas del Pilar.
El 80% de la plantilla participó en la votación, que finalizó a las 19.00 horas de ayer. De los 80 empleados, 40 apoyaron los paros, cuatro votaron y contra y dos.
La representante de los trabajadores, Pilar Fuentes, explicó que la operadora tan solo ha cumplido uno de los acuerdos que se pactaron en octubre: el pago del plus de 125 euros. «El dinero no es lo más importante porque no nos garantiza nuestro derecho al descanso», explicó.
Entre los que todavía están pendientes, destaca la reorganización de los cuadros de marcha que garanticen el descanso de los conductores. Un cuadro de marchas que, según aseguró Fuentes, es «esencial por el estrés al que estamos sometidos, por lo que se convierte en una cuestión de seguridad».
Explicó que tampoco se ha iniciado el registro de las horas de conducción, que reflejaría las horas que lleva al volante cada empleado. Este sistema tendría que haberse instalado el día 1 de este mes. Según el comité, la operadora no ha iniciado las labores de mejora en la cabina del Urbos 3 ni respetado el calendario de reuniones trimestrales previsto. Tampoco se ha instalado la caseta de descanso que reclaman. «Se ha instalado una en Mago de Oz que está sin acondicionar», denunció.
Con el aval de la plantilla, se inicia ahora un periodo de negociación que evite la tercera amenaza de huelga del tranvía.
