La concejala de Participación Ciudadana, Elena Giner, admitió ayer que el Gobierno de Zaragoza en Común (ZeC) a día de hoy no tiene definido un programa para tratar de erradicar la venta ilegal del rastro de la Expo. Sí anunció que el primer paso debe ser regular la venta ilegal.

Para Giner la solución pasa por una intervención social, paralela a la policial, ya que muchos de aquellos que venden de forma ilegal lo hacen para «ganarse la vida» con productos propios o de segunda mano. La concejala insistió en que la medida que se adopte en ningún caso debe «criminalizar la pobreza».

La responsable de Participación Ciudadana explicó durante la comisión de su área que es esencial diferenciar el intercambio ilegal que se produce durante la mañana y aquellos nocturnos, donde, según la oposición, vienen las mafias de otras ciudades a vender productos que, en su mayoría, han sido robados.

Giner fue clara: «Diferenciar lo social con lo legal no es fácil». Por la mañana el rastro y la zona ambulante conviven con una zona no regulada y «lo que pasa por la noche es otra cosa», donde, aseguró que la Policía no ha dejado de intervenir en ningún momento. «Es necesario intervenir en las prácticas delictivas pero centrándonos en qué queremos evitar y qué queremos erradicar», algo en lo que todavía se está trabajando dado que se trata de una situación que lleva años reproduciéndose.

La concejala negó que exista un efecto llamada por la falta de presencia policial, como aseguraron desde la oposición, sino que «el único efecto es la pobreza».

Desde el PSOE aseguraron que este mercadillo se está convirtiendo «en el bazar de las tinieblas». El PP advirtió a Giner de la responsabilidad subsidiaria que tiene el Gobierno en caso de que suceda algo grave y delictivo. Por su parte, C’s criticó que se utilicen los derechos sociales para ocultar la problemática del rastro. Y CHA instó a ZeC a crear equipos multidisciplinares y a no volver a retirar la presencia y vigilancia policial.