La Comisión de Hacienda de las Cortes ha aprobado hoy dos modificaciones presupuestarias por 31 millones que permitirán pagar las nóminas del profesorado de la escuela concertada gracias a la abstención de Podemos, que hace quince días impidió que salieran adelante al votar en contra con el PP.

El Gobierno de Aragón ha presentado por segunda vez en dos semanas estos expedientes que en la sesión del día 17 apoyaron PSOE, PAR, Ciudadanos y CHA y rechazaron PP y Podemos, el único que ha cambiado su voto por la abstención para permitir el pago de los salarios a los profesores y cortar de raíz una "serpiente de verano" creada, en opinión del portavoz de Hacienda de la formación morada, Héctor Vicente, por los populares en una maniobra para evidenciar que hacen una oposición "feroz" al Gobierno.

Además de al PP, Vicente ha criticado al Ejecutivo y especialmente al consejero de Hacienda, Fernando Gimeno, a quien ha pedido de nuevo su dimisión por "falsear las cuentas", en este caso al infradotar la concertada "a sabiendas", actuar "de espaldas" a las Cortes y permitir al PP hacer un "politiqueo" a costa de trabajadores en una maniobra que a su juicio, ha llegado a sorprender "a propios y extraños".

Pero Podemos ha cambiado su voto, ha insistido, porque en esta ocasión el Gobierno ha asumido que está en minoría, ha dado explicaciones y ha habido cierto nivel de diálogo.

Por su parte, el portavoz de Hacienda del PP, Antonio Suárez, ha justificado el voto en contra de su grupo en que también rechazaron el presupuesto por su insuficiencia para hacer frente a los gastos de la concertada, porque no garantizan la pervivencia de las aulas abiertas y porque se sostienen en unos impuestos "agresivos", además de considerar que la educación no puede ser "moneda de cambio ni del sillón de Lambán ni de la cabeza de Gimeno".

Suárez ha lamentado la "cobardía continuada" de Gimeno por no comparecer él en la comisión para defender los expedientes -ha acudido como hace dos semanas la secretaria general de Hacienda, Dolores Fornals-, y ha insistido en que su grupo votará en contra de toda modificación presupuestaria que llegue al parlamento "manu militari", porque el PP no va ser la "muletilla" para que el Gobierno "pueda jugar con unos y con otros".

Además, ha criticado la "irresponsabilidad" de Podemos y le ha pedido que diga cuál es el precio real que ha puesto al Gobierno para "tragar con esto" porque a su entender, le importa "un bledo" el sistema educativo y ha decidido abstenerse para evitar que el Ejecutivo se viera obligado a negociar mejoras para la concertada con el PP, al tiempo que ha acusado al PSOE de pactar con la formación morada para ir cerrando aulas de la concertada "hasta que no quede ninguna".

Por su parte, el portavoz del PAR, Arturo Aliaga, ha dejado claro el apoyo de su formación a un modelo educativo en el que coexisten la escuela pública y la concertada y ha hecho hincapié en que los políticos están para solucionar problemas y no para crearlos y en que es fundamental anteponer la formación de los alumnos a otros intereses y, en ese aspecto, ha pedido al Gobierno que retome el pacto por la educación, que se rompió con la judicialización.

Javier Martínez, de Ciudadanos, ha mantenido el apoyo de su grupo a estos cambios presupuestarios y ha opinado que la situación se había convertido en "un juego a ver quien puede más", porque el PSOE tiene "dos novias" y el PP ha quedado como la "despechada" y Podemos, como el "angelito de la guarda de la concertada", olvidando su "ataque despiadado y feroz" a esta parte de la educación.

Isabel García, del PSOE, ha criticado a los populares por intentar "secuestrar" las nóminas de la concertada con un "chantaje" al Gobierno y por no aprovechar la oportunidad de enmendar su postura, ya que la concertada se ha presupuestado como siempre, tratando de solucionar las insuficiencias una vez detectadas, eso sí, ha matizado, la pasada legislatura "sin montar numeritos", con lo que "no parece muy ético", ha dicho, que el PP intente bloquear la acción del Gobierno solo para desgastarlo.

Por el grupo Mixto, Carmen Martínez, de CHA, ha lamentado la incertidumbre que se ha generado entre los trabajadores de la concertada y ha considerado que los populares con su postura, "fuera de toda su lógica y de sus principios", están utilizando la educación como arma política. "Eso en política es lo más deleznable", ha aseverado.