La Confederación de Empresarios Aragoneses (CREA) considera positiva la evolución del mercado laboral en Aragón en abril, tras los datos del paro dados a conocer hoy por el Ministerio de Empleo y Seguridad Social.
Además, se ha registrado un descenso del desempleo y aumento de la contratación y la afiliación a la Seguridad Social, según informa la CREA en una nota de prensa.
La CREA también destaca en su comunicado, no obstante, que los datos de desempleo continúan siendo muy elevados y exigen que las empresas, principales generadoras de puestos de trabajo, su actividad y competitividad estén en el centro de las políticas económicas.
Las propuestas que CREA ha hecho llegar a los partidos políticos para las elecciones del 24 de mayo incluyen aspectos como la lucha contra la economía sumergida y la competencia desleal; el cumplimiento real, con sanciones en caso contrario, de los plazos de pago a proveedores por administraciones y empresas.
Así como eliminar anticipos de pago que merman la liquidez de las empresas y aquellos impuestos que supongan desventajas competitivas respecto a otros territorios o reducir los costes energéticos, entre otros.
El paro registrado ha descendido en Aragón en abril tanto respecto a al mes anterior (-2,67 %, con 2.730 personas menos en desempleo que en marzo) como en comparación con abril del año pasado (-5,44 %, que representa una reducción de 5.736 personas). Con estos datos, el total de personas en desempleo inscritas en el INAEM se sitúa en 99.638.
Esta evolución está en consonancia con la estatal y también ha sido similar en las tres provincias aragonesas con reducciones mensuales e interanuales encabezadas por Teruel (-4,99 % y -8,08 %, respectivamente), seguida por Zaragoza (-2,49% y -5,02%) y Huesca (-2,03 % y -6,00 %). También ha alcanzado a todos los sectores, siendo especialmente significativos los descensos interanuales en Construcción (-21,06 %) e Industria (-10,76 %).
Asimismo, las cifras muestran la continuidad de la tendencia de reducción del desempleo, con ya más de un año de descensos interanuales y con el número de parados en Aragón por debajo de las 100.000 personas por primera vez desde 2011.
