El éxito de la Marea Verde, colectivo que lidera las protestas y movilizaciones contra los recortes en educación, y la actividad de la Marea Blanca (sanitarios) y la Marea Roja (parados) ha propiciado la aparición de otros dos movimientos que defienden otros dos sectores, la Marea Naranja, contra las medidas de ajuste en servicios sociales, y la última en incorporarse, la Marea Negra, de apoyo a los mineros.

La Marea Naranja es un grupo formado por trabajadores del Instituto Aragonés de Servicios Sociales (IASS) de las tres provincias aragonesas, así como trabajadores de los centros municipales del sector y personas que pertenecen a entidades que trabajan en el mundo de los servicios sociales. "Esta Marea Naranja la componen personas que pertenecen a Sistema de Servicios Sociales tanto públicos como de iniciativa social y ya saben de nuestra existencia la plataforma de trabajadores sociales del ayuntamiento, el colegio profesional de trabajadores sociales de aragon, los centros comarcales y personas de entidades fundamentalmente del mundo de la discapacidad", expuso su portavoz, Luis García.

La intención es que a la plataforma se puedan adherir tanto entidades sociales e instituciones para emprender movilizaciones "contra los recortes en las prestaciones básicas de los servicios sociales generales, en materia de dependencia, en la adjudicación de plazas de alojamiento alternativo de personas en situación de dependencia, al cierre de centros de servicios sociales y la eliminación de programas complementarios en discapacidad y exclusión desarrollados por entidades sin ánimo de lucro", apuntó García. Asimismo, Marea Naranja reclama el "cumplimiento" de la Ley de Dependencia y de la Ley de Servicios Sociales de Aragón.

De momento, el éxito es rotundo. De hecho, ya se han acabado las 200 primeras camisetas de color naranja que se han elaborado y cuyo diseño ya ha sido reclamado por otras ciudades. "La idea es que las personas vinculadas al sistema de servicios sociales tanto públicos como entidades sociales se pongan una camiseta naranja y esto se vaya extendiendo hasta que el riachuelo se transforme en un río que al desembocar en el mar y convertirse en marea sea capaz de transformar las políticas basadas en el beneficio económico en otras basadas en el desarrollo humano, donde el objetivo principal sean las personas y sus derechos", indicaron desde el colectivo, que ha fijado los viernes como día designado para sus protestas.

Al nacimiento de Marea Naranja se ha unido el de la Marea Negra, en apoyo a los mineros, sus familias y las comarcas afectadas. El Movimiento Ciudadano de Apoyo a los Mineros, colectivo que abandera el movimiento, explica que en Zaragoza están planificando futuras movilizaciones y la Marea Negra expresará su apoyo a los mineros, sus familias y las comarcas afectadas "acompañando al resto de colectivos que luchan por una sanidad y educación de calidad, contra el paro, contra los desahucios".

También llevarán a cabo acciones "a favor de un cambio en las políticas que se están imponiendo que hacen pagar la crisis a los que menos culpa tuvieron y premian a los que la crearon a través de asuntos como los rescates bancarios". Por ello, animan a los ciudadanos a apoyar al sector de la minería y a que esta Marea Negra se extienda por todo el país.