Los enfermos de hepatitis C en Aragón solicitaron ayer la disolución de la comisión de seguimiento encargada de estudiar los casos y aprobar la medicación al considerar que su desaparición "aceleraría" el proceso de curación de los pacientes, ya que "evitaría" los entre 4 y 5 meses de espera que, según su información, sufren ahora los enfermos.

Así lo denunciaron ayer representantes de la plataforma de afectados por esta patología en la comunidad, que exigieron que este consejo, que se reúne regularmente, esté compuesto "exclusivamente" por médicos. "Y no por personal de la Administración y políticos, cuyos intereses se alejen del bien inmediato del paciente", señalaron.

El colectivo también denunció que desde el Departamento de Sanidad del Gobierno de Aragón "solo" se ha empezado a recetar el nuevo tratamiento a los casos más graves, aquejados por un grado F4, y reclamaron "medicación para todos" porque "las consecuencias, se tenga el nivel que se tenga, pueden ser peligrosas debido al nivel de contagio", añadieron los representantes. Según apuntó la representante de la Comisión de Salud de la Federación de Asociación de Barrios de Zaragoza (FABZ), Soledad Hernández, "entre 80 y 100" enfermos son los que estarían recibiendo el nuevo tratamiento. "Muchos de los cuales ya lo tenían solicitado hace un año o más", señaló.

RESPUESTA DE SANIDAD

Sin embargo, horas después de que se hicieran estas declaraciones, Sanidad envío un comunicado asegurando que en Aragón ya se ha prescrito a 395 pacientes de hepatitis C con antivirales de última generación (Harvoni, Viekirax y Exviera) y matizó que, "si es necesario", los casos graves F4 "se aprueban en el mismo momento que llegan, sin hacer falta que lleguen a la comisión", explicó la consejería.

La Plataforma de Afectados por Hepatitis C en Aragón solicitó la puesta en marcha de tres medidas. Por un lado, la elaboración de un censo de afectados en el conjunto de la comunidad porque "el desconocimiento del número de enfermos es injustificable, podría haber miles y, como mínimo, deberían estar cuantificados", señalaron.

También consideran "indispensable" que se disponga de medios para tratar la enfermedad. "Solo tenemos un fibroscan --sistema que permite conocer el grado de afección de hepatitis-- y eso aumenta el tiempo de demora. Hay quien opta por ir a la privada porque hay esperas de más de 11 meses", denunciaron.

Por último, pidieron una aplicación "real" de las partidas económicas para la atención médica y su tratamiento. "La medicación sí es cara, pero es algo que se puede negociar, porque hay intereses médicos y de farmacias", señalaron.