La última reunión del Consejo de la Ciudad de Zaragoza no estuvo exenta de discusión en uno de los asuntos más polémicos que se llevaban a la convocatoria de esta semana: las medidas antibotellón y la mesa de trabajo que el ayuntamiento se había comprometido a crear para estudiar las decisiones a adoptar en el futuro a corto plazo. Hubo un enfrentamiento entre la Federación Católica de Padres de Familia y Padres de Alumnos de Zaragoza (FECAPA) y el teniente de alcalde de Participación Ciudadana, Jerónimo Blasco, porque este colectivo le mostró su malestar porque ahora el compromiso adquirido por mandato del pleno "se va a retrasar hasta junio".

Así lo aseguró a este diario Pedro Martínez, presidente de Fecapa y representante de este colectivo en el Consejo de la Ciudad, quien también lamentó la "falta de rigor" y la "actitud prepotente" con la que el responsable del área de Participación Ciudadana, Jerónimo Blasco, está llevando este tema. "llevamos esta petición al pleno de noviembre y allí se comprometió a crear una mesa de trabajo que en tres meses debería redactar sus conclusiones, pero lo único que ha habido es una reunión, el 10 de enero".

FALTA DINERO Según explicó Pedro Martínez, Blasco alegó que "había que elaborar un estudio previo que analizara la situación actual y que no se ha podido hacer porque no había dinero para pagarlo". Al parecer, además, el consistorio tenía la intención de que este estudio lo elaborara una empresa especializada, pero que ninguna había mostrado interés por las condiciones económicas que se ofrecían. Así que se decidió acudir a la Universidad de Zaragoza, con la que ya se está trabajando, según apuntó el propio Jerónimo Blasco, para tener un análisis pormenorizado de la realidad actual que se está dando en la ciudad.

Sin embargo, para Fecapa esto solo significa "dar largas al problema" porque, según indicó su presidente, "hasta nos hemos ofrecido nosotros a colaborar en la elaboración de ese estudio", sin que haya habido respuesta positiva. Por eso su malestar y porque los plazos ahora se vayan a alargar hasta junio. "Nos parece una falta de respeto tremenda al mandato del pleno, porque en realidad lo que ocurre es que este problema nunca le ha interesado al señor Blasco", afirmo Pedro Martínez, quien insistió en que "las familias zaragozanas estamos muy preocupadas".

Tras el enfrentamiento que ambos mantuvieron, Martínez le recrimina que "el Consejo de la Ciudad se utilice más para fines políticos, cuando debe imperar es lo social". No obstante, el ayuntamiento asegura que se va a agilizar el trabajo para obtener estas conclusiones cuanto antes.