La Asociación en Defensa por la Sanidad Pública de Aragón (Adspa) mostró ayer su "total rechazo" ante la intención del departamento de Sanidad del Gobierno de Aragón de reducir de ocho a tres las áreas sanitarias de la comunidad (una zona única por cada provincia), tal y como volvió a ratificar el pasado jueves el consejero Oliván en la comisión de Sanidad de las Cortes.

El colectivo, que habla de "demagogia" por parte de la Administración a la hora de justifica la reestructuración del mapa sanitaria, apunta que la medida es "contraria a la Ley General de Sanidad, vigente desde 1986, y que recomienda la organización territorial de la sanidad pública en áreas sanitarias de aproximadamente 250.000 habitantes", matizó la asociación en un comunicado.

MODELO COMUNITARIO Al mismo tiempo, apuntó que "suprime el modelo comunitario basado en entidades territoriales" y conlleva "la masiva supresión de puestos de trabajo en la sanidad, con el crecimiento consiguiente de las listas de espera".

La plataforma considera que la reducción "está enmarcada" en una actuación del Gobierno central de "desmantelamiento de las áreas sanitarias" con un objetivo "evidente" que es "crear grandes espacios para la competencia público-privada".

La Asociación en Defensa por la Sanidad Pública de Aragón habló de "demagogia" por parte de la DGA "a la hora de justificar" la reducción. "Se afirma que con el área única se posibilitará la formación de los facultativos con su desplazamiento a otros centros, cuando se sabe que nunca ha habido problemas de este tipo para el aprendizaje de técnicas o reciclaje del personal".

Entre sus propuestas, el colectivo solicita a la DGA que "mantenga el nivel asistencial territorial" y "la estimulación de la implicación y participación de los trabajadores sanitarios" en la gestión pública de los procesos, "con desarrollo del trabajo en condiciones laborales dignas y libres de posibles intereses privados", matizaron.