El consejero municipal de Servicios Públicos y Personal del Ayuntamiento de Zaragoza, Alberto Cubero, ha anunciado hoy que abrirá las negociaciones para solucionar el conflicto con las brigadas de arquitectura la próxima semana, cuando se cierre el que mantiene con los guardallaves, ya que rechaza mantener dos mesas a la vez.

Decenas de trabajadores han acudido hoy a la Comisión de Servicios Públicos y Personal a protestar por su situación laboral y a exigir a Cubero que se siente a hablar.

Así, el presidente de la Junta de Personal del Ayuntamiento de Zaragoza, Fernando Montero, ha considerado "vergonzoso" e "indignante" que el consejero haya achacado el retraso en la apertura de las negociaciones a que el criterio sea no mantener más de dos mesas a la vez sobre conflictos concretos.

Ha rechazado también las palabras de Cubero en las que califica de "agravio comparativo" cualquier subida salarial a este colectivo.

"Agravios comparativos son las subidas que está habiendo al grupo A del Ayuntamiento, indiscriminadamente, de 9.000 a 14.000 euros al año", ha afirmado.

Montero, no obstante, ha recordado que simplemente piden la equiparación de este personal, que entre otras cosas se encarga de la preparación de diversos actos festivos, a otros puestos similares en el Consistorio.

Ello genera, ha remarcado, que estos trabajadores soliciten el concurso de traslados en cuanto pueden y la plantilla quede mermada, con el consiguiente aumento de la carga de trabajo para los que quedan.

Ahora mismo son en torno a cien los empleados de las brigadas de arquitectura y proponen que se incremente la plantilla hasta los 137 con un salario de unos cien euros más al mes.

Por último, ha aclarado que "en ningún momento" se han planteado hacer huelga o dejar de hacer horas extra durante las Fiestas del Pilar, pero sí que convocarán movilizaciones a partir de septiembre si las negociaciones siguen sin comenzar.

En la comisión, ha intervenido en defensa de estos trabajadores municipales la concejala de CHA Leticia Crespo, quien ha recriminado a Cubero que, si en una plantilla de más de 5.000 personas, "no puede abrir dos negociaciones a la vez", se debería replantear su cargo.

A su juicio, estas brigadas requieren gente suficiente, medios suficiente y que se resuelva su desequilibrio salarial de forma "urgente".

Cubero ha insistido en que las negociaciones se abrirán la próxima semana cuando se cierren las que mantiene con los guardallaves, que están a falta de los informes necesarios.

Lo ha justificado también por el trabajo "ingente" que requiere la elaboración de las ofertas de empleo, que son una "prioridad muy prioritaria" para su área.