Unos pocos privilegiados podrán asistir hoy al primer ensayo general de los danzantes de Huesca de cara a las fiestas de San Lorenzo. Esta actividad, que forma parte del llamado pórtico laurentino y que ya casi se ha convertido en una tradición en sí misma, permite disfrutar de uno de los actos más conocidos de las fiestas con menos agobios que en los días grandes.

El ensayo se celebrará, con el acompañamiento de la banda municipal de música, a las 20.30 horas en el patio del colegio Pío XII. De este modo la formación folclórica estará lista para su actuación central en la plaza de San Lorenzo a las ocho y media de la mañana del próximo jueves, 10 de agosto, en el que es uno de los actos centrales de un programa de fiestas que ya calienta motores.

La plaza de Navarra se llenó ayer de curiosos y comilones con la celebración del VIII Concurso de Pollo al Chilindrón organizado por Radio Huesca y Huesca Televisión. La ganadora fue una cocinera en prácticas de un restaurante de la ciudad llamada Neus Martí Badía. Su receta es de las que hacen salivar: pollo relleno glaseado con el chilindrón en tres texturas, torrezno de piel y bizcocho de albahaca. El jurado valoró su sabor, pero también el espíritu vanguardista para otorgarle el primer premio, valorado en 300 euros y entregado por el alcalde de la ciudad, Luis Felipe.

OFRENDA MULTITUDINARIA

Otra de las citas multitudinarias del pórtico laurentino fue la tradicional ofrenda en el santuario de Loreto en la que participaron las marialesas como su primer acto oficial. El prior de la cofradía, Santiago Pardo, mostró su «satisfacción» por la afluencia de personas a la ermita donde, al parecer, el patrón oscense nació y pasó su niñez.

Como en otras ocasiones, el rito religioso se mezcló con una causa solidaria. «Hemos conseguido casi seis cajas llenas de comida que donaremos al Banco de Alimentos», explicó Pardo. También destacó que ha sido un año especial porque la ermita lucía la techumbre renovada, pero recordó el prior que «quedan cosas por hacer» para mejorarla, como proporcionarle el suministro eléctrico que ahora llega de un vecino, o arreglar las dependencias de una construcción contigua, donde las obras que se quedaron a mitad hace tiempo podrían terminarse. Además, en el 25 aniversario de la cofradía, todo apunta a unas buenas fiestas, sobre todo porque la cita de ayer «siempre es un buen termómetro».

El presidente de Os Casaus, Alejandro Ciprés, corroboró esta impresión. Cuando también se cumple un cuarto de siglo de la fundación de la peña destacó que están «muy agradecidos» de los distindos reconocimientos oficiales que han tenido a su labor. Entre ellos han recibido la Parrilla de Oro.

En la jornada de ayer una gran parte de los miembros de la peña participaron en la ofrenda en el santuario de Loreto «con mucha emoción». Después hubo una comida popular que se cerró con la actuación de una coral que interpretó canciones aragonesas, habaneras y parte de repertorio tradicional. «El ambiente en la ciudad ya es totalmente de fiesta», expresó Ciprés.

Las celebraciones en esta edición incluyen más de 300 actos. Los hosteleros esperan buenas cifras de asistencia, especialmente el día del chupinazo y los fines de semana. Las ferias y los comerciantes ambulantes ya han empezado a llegar a la ciudad.