Un sector tradicionalmente crítico con la gestión sanitaria en Aragón ha situado a la comunidad entre las que mejores servicios ofrecen a sus usuarios. Así se extrae de la undécima edición del Informe de la Federación de Asociaciones para la Defensa de la Sanidad Pública (FADSP) a nivel nacional dado a conocer ayer por el portavoz del colectivo, Marciano Sánchez Bayle, y que sitúa a Aragón como la segunda mejor de España solo por detrás de Navarra.

El estudio de este año viene a consolidar la clasificación de la comunidad entre las más destacadas de España a lo largo de los últimos años. De hecho, el año pasado también fue la segunda más valorada --Navarra volvió a ser la primera-- y acumula un lustro entre las cinco primeras, mientras que en el 2009 ocupaba la novena posición.

Aragón es líder en varios apartados, como la valoración del usuario (7,29) o en el menor porcentaje de gasto sanitario dedicado a contratos con la privada (4%). La comunidad se sitúa más en la media estatal en otros aspectos, como el presupuestario sanitario por cápita (1.432,40 euros), camas (3,77 por cada 1.000 habitantes) y quirófanos (9,43).

Comunidad Valenciana, Canarias, Murcia y Baleares se sitúan un año más como las comunidades autónomas con peores servicios sanitarios según el informe, que constata un aumento de la disparidad de servicios sanitarios entre regiones y que contempla otros parámetros como las listas de espera, el gasto farmacéutico o la valoración de los ciudadanos.

Tras ella se sitúan Madrid, Extremadura, Cataluña y Castilla-La Mancha con servicios "deficientes"; La Rioja, Galicia, Cantabria y Andalucía con servicios "regulares" y Castilla y León, Asturias, País Vasco, Aragón y Navarra como las mejores.

Sin embargo, Sánchez Bayle advirtió de que una mejor puntuación "no supone que no se hayan producido recortes y retrocesos en el sistema sanitario", sino que estas comunidades, o estaban en una mejor posición de partida o los recortes han sido menores.

El informe destaca también que las diferencias entre comunidades son "excesivas" y que la "gran disparidad" en los servicios entre regiones "pone en peligro la cohesión y equidad".