Aunque hayan cerrado varias tiendas especializadas en productos gastronómicos y sean pocas las vinaterías clásicas que se mantienen, lo cierto es que Zaragoza muestra su faceta de metrópoli con la apertura de establecimientos destinados a generar felicidad entre los aficionados a la buena mesa.

Una de las últimos en abrir sus puertas ha sido El Sitio de Eugenia -Asalto, 43. Zaragoza. 976 390 825-, definido en su propia fachada como Espacio singular: ultramarinos, experiencias gastronómicas y rutas turísticas, que va mucho más allá del comercio de delicadezas gastronómicas.

Pues en los dos niveles de su precioso espacio desarrolla presentaciones, degustaciones, catas de vino -también a domicilio- y otras actividades, como los viajes. De hecho, para este domingo propone una excursión a la bodega El Vino del Desierto y al Monasterio de Sijena y el próximo jueves organiza una degustación de chocolates de Pastelería Belenguer, fundada en 1918 en Alcorisa.

Además, se pueden adquirir quesos, mermeladas, sales diferentes, café, patés, arroces, aceites de oliva, panes, embutidos, miel, siempre de contrastada calidad, que pueden convertirse en lotes y tablas de degustación. Dada la profusión de catas y actividades, su horario es de martes a sábados, de 10 a 18 horas -los domingos solo por la mañana-, sin cierre al mediodía.

PASTA ITALIANA Y MUCHO MÁS / La cocina italiana sigue siendo una gran desconocida en nuestro país, ya que va mucho más allá de la pasta y la pizza. Que es lo que ofrecen de forma artesanal en Pasta fresca de Zecchi -Avda. César Augusto, 29. Zaragoza. 876 161 316-, pero también otros productos, mucho menos conocidos. Por ejemplo mortadela, que se disfruta en tacos gruesos y no en finas lonchas como creen muchos; mozzarella de verdad, de leche de búfala; parmesano y grana padano a buen precio, además de otros quesos, cotechino, cervezas artesanas, aceite, vinagres, panettones, mermeladas y, por supuesto harinas y pasta seca.

Manu, italiano, se encarga de elaborar la pasta fresca, que sirven tal o cual -espaguetis, cintas, lasaña, raviolis, ñoquis, etc.-, acompañada también de bastantes salsas artesanas -pesto verde o rojo, de setas, de nueces...- y también ya cocinada y con salsa a elección. Y no le hace ascos a la innovación y a la integración con otras culturas, como muestran sus cintas al curry o pappardelle de ras el hanout.

Preparan la masa de pizza artesanal con masa madre fermentada a lo largo de 72 horas -también a la venta-, y sobre la base de tomate, mozzarella y scamorza affumicata, se pueden añadir el resto de ingredientes, como gorgonzola, jamón serrano o cocido, bacon, anchoa, salame, olivas, cebolla, champiñones, etc.

Ofrecen también servicio a domicilio y disponen de un blog, todavía no muy activo, en el que van colgando recetas italianas caseras y auténticas.

Toda una alegría para los buenos aficionados a la cocina, pues, además, sus precios son bastante razonables.