El Tribunal de Cuentas ha concluido que ni en las obras de construcción del corredor verde Oliver-Valdefierro de Zaragoza, ni en la del cuartel de la Policía Local en La Paz ni en la concesión de subvenciones del año 2011 hubo indicios que apunten a la presunta responsabilidad contable por alcance que había denunciado una asociación, Escuela y Despensa, en la propuesta de liquidación provisional de la fiscalización realizada sobre el ejercicio 2011, cuando gobernaba la ciudad el PSOE.

La actuación se remonata a las presuntas irregularidades detectadas en su día en el informe de fiscalización de la Cámara de Cuentas de Aragón, en el que se basaba el escrito de Escuela y Despensa, de julio del 2015. Un escrito que no acompañó el Ministerio Fiscal, que desistió de algunos de los supuestos que esta planteaba, pero sí en otros, por lo que se solicitó el nombramiento de delegado instructor.

Los hechos que denunciaba, y sobre los que el pasado jueves el tribunal de Cuentas concluyó que no había tal responsabilidad contable, se basaban en el pago de 1.319.864 euros por las obras de adecuación del paso inferior del túnel de Soldevilla que no se llevó a cabo dentro de la obra del corredor verde, con el que la asociación y la Fiscalía coincidían, porque tampoco constaba que hubiera un modificado de obra que justificara la reinversión en otros trabajos ni reducido el coste final abonado. Pero que ahora se explica que el desfase global de la obra fue del 9%, es decir, casi un millón de euros, en esa primera fase, y del 19% en la segunda (se adjudicó por 13,7 y costó al final 16,7). O los 6.723.401 euros de certificaciones que no habían sido contabilizados, según la Cámara de Cuentas, que se justifica con estos sobrecostes y con obras adicionales, por valor de 1,67 millones que no figuraban en el proyecto original.

Respecto al cuartel de la Policía Local de La Paz se puso el foco en un pago de 110.000 euros que la Cámara de Cuentas entendía que no estaba justificado y el abono de otros 100.000 en compensación a la unión temporal de empresas que construyó el edificio por unos gastos asociados al IVA de las operaciones de permuta que no debió ser resarcida.

Respecto al túnel de Soldevilla, entiende el Tribunal de Cuentas que fue separada del proyecto del corredor verde inicial, que se adjudicó por 10,59 millones que acabó costando, sin hacer esta infraestructura, 11,55, un 9% más. Estos trabajos finalmente, que costaban 1,53 millones, acabó siendo ejecutada con cargo al Fondo Estatal de Inversión Local (FEIL) por 3,46 millones.

En el cuartel de La Paz, el Tribunal de Cuentas entiende que no hubo tal resarcimiento a la UTE constructora por el IVA sino el abono de una devolución por una cuantía que había recibido antes en préstamo.