La que fuera denunciante y testigo protegido de la operación Molinos, la también exalcaldesa de La Muela (sucesora se Pinilla) Marisol Aured, acogió ayer con el «máximo respeto» la decisión del Tribunal Supremo de anular parte de la sentencia y obligar a repetir parte del juicio.
Una vista oral en la que es posible que tenga que volver a participar, como testigo, algo que «nunca es plato de buen gusto», pero a la que no faltará.
En cualquier caso, independientemente de este resultado y de la futura sentencia, Aured sigue sin arrepentirse de su denuncia. «Me queda la satisfacción de haber frenado las irregularidades en el Ayuntamiento de La Muela», afirmó. Y eso que tras su denuncia ha sido imputada hasta ocho veces por corrupción, siendo absuelta de todas las causas.
Según anticipaba anteayer el actual alcalde por CHA, Adrián Tello, llevarán a pleno la decisión de volver a personarse en el nuevo juicio, y el PP municipal aún no ha abordado el asunto, confirmaba Aured, por lo que no podía plantear una postura.
Aunque la exalcaldesa rehusó comentar la resolución judicial más allá del respeto, sí mostró su esperanza de que el caso se resuelva definitivamente «lo más pronto posible, porque La Muela necesita pasar página de una vez respecto a este asunto», opinó. Pero entre el nuevo juicio y los posibles recursos, el asunto volverá a ir para largo.
