El Centro de Coordinación Operativa (Cecop) del servicio de emergencias del 112 decidió ayer desactivar el Plan Territorial de Protección Civil (Platear) de Aragón ante la evolución favorable de la inundación provocada por la avenida extraordinaria del río Ebro y de sus afluentes.

Según informó el Gobierno aragonés, los responsables del centro desmontarán el puesto de mando avanzado ubicado en Pina de Ebro, uno de los más afectados por la riada, aunque se mantendrá activado el Plan Especial de Protección Civil de inundaciones en fase de preemergencia como medida de precaución.

Así lo aseguró ayer la directora general de Justicia e Interior del Ejecutivo autónomo, María Ángeles Júlvez, tras presidir la última de las reuniones del Cecop con motivo del episodio extraordinario de crecida del río Ebro.

La desactivación del Platear permitirá dedicar parte de los recursos utilizados días atrás a combatir las inundaciones a la reparación de los daños causados por el agua. «La fase de preemergencia significa que continuaremos con una actitud vigilante», señaló la responsable técnica de Justicia e Interior en la comunidad.

Además, ayer los trenes de la línea Zaragoza-Caspe-Mora la Nueva-Barcelona entre la capital aragonesa y La Zaida recuperaron el recorrido habitual después de que el pasado domingo tuvieran que ser suspendidos por las afecciones que causó la crecida del Ebro.

Asimismo, el Consejo de Ministros estudiará hoy la adopción de medidas urgentes para hacer frente a los daños provocados por la crecida. Este será uno de los principales asuntos que abordará el órgano de gobierno en la reunión que presidirá Mariano Rajoy en Moncloa. Por otro lado, el Consejo Aragonés de Cámaras de Comercio acordó ayer instar a la administraciones a efectuar de forma urgente las inversiones en las infraestructuras dañadas en los municipios de la ribera.