El descarrilamiento de un tren de mercancías entre Casetas y Alagón provocó ayer el desvío y los retrasos en diez convoyes de Larga y Media Distancia. La incidencia no afectó al servicio de Cercanías al discurrir por otro recorrido. Los viajeros afectados se encontraron con retrasos de más de media hora.

Los trenes fueron desviados por un trazado alternativo en dirección a Bilbao y recuperaban el paso habitual por las estaciones a la altura de Cabañas de Ebro, pasada la estación de Grisén. Hasta después de las 22.00 horas no se pudieron retirar los vagones descarrilados por causas que se desconocen. El accidente se produjo sobre las 16.00 horas de la tarde sin causar daños personales. A la zona se desplazaron varias dotaciones de la Guardia Civil. Fue necesario actuar en el sistema eléctrico, que quedó completamente destrozado tras la salida de las vías. Algunos testigos presenciales señalaron que en algún momento se observaron llamas en los vehículos siniestrados.

Los viajeros de los diez trenes afectados podrán presentar su reclamación para solicitar la indemnización que les corresponda en cada caso, según informó Renfe en un comunicado.