Las bandas de narcotraficantes siguen buscando métodos de camuflar la droga para eludir la intercepción de los envíos. A las recientemente descubiertas de la inyección en gominolas o la más burda de los bocadillos de chorizo se añade la última descubierta por la Policía Nacional en Huesca: las latas de refresco.
La banda, de origen latinoamericano, que la Policía Nacional ha desmantelado en la operación Correcaminos, utilizaba estos recipientes vaciados, entre otras técnicas, para transportar la cocaína, según han descubierto los agentes. Para ello, una vez vaciadas, las rellenaban de un material arcilloso que simulaba el peso del refresco, y en él incrustaban un depósito para la droga, antes de volverlo a tapar.
La Policía llevaba tiempo tras su pista, que requirió vigilancias en Huesca, Zaragoza y el País Vasco. Finalmente arrestaron a siete colombianos en Huesca y a tres dominicanos en Jaca, tres de los cuales entraron en prisión. En la operación se decomisaron1.500 gramos de cocaína y más de 14.000 euros.
ACEIFAS
Por otro lado, la Guarcia Civil desmanteló en Barbastro, Monzón y la localidad leridana de Mollerusa otra organización de narcotraficantes --con siete integrantes de origen magrebí y español-- en la operación Aceifas, a la que se le incautaron 615 gramos de cocaína y 2.200 de marihuana, entre otros efectos.
