La Guardia Civil ha detenido a cinco personas por un presunto delito contra la salud pública al desmantelar un matadero clandestino en la localidad zaragozana de Fuentes de Ebro, donde se sacrificaba ganado porcino sin autorización y sin cumplir las condiciones higiénico-sanitarias.

El Instituto Armado puso en marcha el pasado mes de octubre la denominada Operación "Butcher" y las investigaciones de los Equipos Roca de La Almunia de Doña Godina y Caspe permitieron la localización en Fuentes de Ebro del matadero en una nave aislada.

Según ha informado la Guardia Civil, el ganado procedía de una explotación ubicada en la misma localidad y era trasladado por las personas investigadas en una furgoneta que se encontraba dada de baja desde marzo del año anterior, tenía la ITV caducada desde 2011 y carecía de seguro obligatorio.

Además, se comprobó que el titular de la explotación ganadera era un vecino de Fuentes de Ebro, propietario de la granja pero no del ganado, ya que se dedicaba a realizar las labores de engorde de los animales para una empresa integradora de Zaragoza.

El pasado martes, día 21, durante las labores de vigilancia de la instalación, los agentes observaron cómo uno de los sospechosos salía de ella y se dirigía a la granja, de la que salió transportando en la furgoneta dos cerdos de grandes dimensiones que fueron trasladados a la nave.

La Guardia Civil accedió a la instalación, comprobó que efectivamente ese lugar era utilizado como matadero clandestino de ganado y encontró a una persona que portaba un quemador conectado a una bombona de butano y justo al lado, el cadáver de una cabeza de ganado porcino, con la piel calcinada que había sido sacrificado recientemente.

También se localizó un cerdo vivo en el interior de la furgoneta, un habitáculo utilizado de secadero y ahumado en el que había varias piezas de carne en dicho proceso, así como varias armas blancas para labores de despiece y una pistola para sacrificar animales con su munición.

En el interior de la nave existían diferentes elementos que determinaban que estaba siendo utilizada como matadero.

La Guardia Civil avisó al Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) y al veterinario de la Diputación General de Aragón, que dictaminó que la carne no era apta para consumo humano, por lo que se sacrificó el animal vivo y se destruyó toda la carne intervenida en la instalación.

Los agentes lograron determinar que la carne obtenida era vendida directamente a personas de nacionalidad rumana vecinas de la Comarca de Valdejalón, no a establecimientos comerciales de la localidad de Fuentes ni al resto de la provincia.

La Guardia Civil ha detenido a las cuatro personas que estaban en la nave, todas de nacionalidad rumana y de edades comprendidas entre los 39 y 46 años, y al propietario de la explotación ganadera, de nacionalidad española, a los que se les imputa un delito contra la salud pública y pasaron a disposición judicial el pasado miércoles.

En las actuaciones fueron intervenidos 16 cuchillos y 2 astrales, una pistola para sacrificar animales con once cartuchos de munición, un soplete quemador con bombona de butano, dos cabezas de ganado y 220 kilogramos de carne en diferentes estado de procesamiento (en salazón, ahumada y curación).