Agentes de policía detuvieron ayer en Huesca a un hombre de 67 años como presunto responsable de una estafa a establecimientos comerciales consistente en la sustitución de los códigos de barras de productos para obtenerlos a un precio muy por debajo de su valor.

Según informó el Cuerpo Nacional de Policía, el sospechoso recorría en su furgoneta localidades de Aragón, Levante y Cataluña y operaba en establecimientos con una gran actividad para perpetrar sus fraudes.

En sus trayectos, el detenido realizaba pequeñas estafas de forma continua que le reportaban unos beneficios medios de 200 a 300 euros, principalmente con distintos tipos de bebidas.

El presunto estafador aprovechaba momentos punta de venta en los comercios que elegía para colocar en paquetes códigos de barra correspondientes a una sola unidad del mismo producto. Una vez en línea de caja, el presunto estafador entregaba al empleado el paquete con el código falsificado y comunicaba que llevaba en su carro de compra otros más del mismo producto. Así, en lugar de tener que hacer frente a un coste real de 10 a 12 euros por un paquete de cuatro bebidas, abonaba 2 o 3 euros.