La Policía Nacional ha detenido a dos jóvenes como responsables del incendio del vivero municipal de Zaragoza, situado en la trasera del hospital Militar. Los agentes tratan de localizar a una tercera persona por su relación con los hechos.

Los dos arrestados, de unos 20 años, señalaron ante el juez de guardia que no hubo intención alguna en esta quema. Según fuentes consultadas por este diario, señalaron que estaban en dicho lugar porque son amigos y que una colilla mal apagada pudo generar el fuego.

Ante las pruebas existentes y la versión acorde con las mismas, el titular del Juzgado de Instrucción número 5 de Zaragoza decidió ponerles en libertad, si bien mantiene la imputación sobre ellos por un delito de incendio con imprudencia.

El fuego se declaró unos minutos antes de las ocho de la tarde en un cañaveral cercano al Huerva. Fuentes municipales detallaron que afectó a una extensión de 1.000 metros cuadrados de vegetación del río y a 1.500 del vivero municipal, en una zona muy cercana a la Z-30, al Seminario, al Centro Teológico de Aragón y al colegio Santa María del Pilar.

El fuego también produjo daños en un área donde se encuentran materiales de desecho del vivero. Precisamente, estos elementos que allí se encontraban produjeron el humo negro que, en los primeros instantes del incendio, llamó la atención de los zaragozanos. No obstante, el fuego no afectó ni al plantero ni a los invernaderos.

Al lugar se desplazaron una veintena de efectivos de los Bomberos de Zaragoza y cuatro vehículos -dos bombas urbanas pesadas y dos bombas nodrizas pesadas- para controlar y extinguir el fuego. También acudieron al lugar agentes de la Policía Local y de la Policía Nacional que recogieron pruebas y que dieron con los autores del incendio. A uno de ellos se le arrestó en las inmediaciones, mientras que otro ya estaba en su vivienda.