Dos jóvenes rumanos de 22 años fueron detenidos el pasado 24 de enero por la Guardia Civil que les imputa 41 delitos de robo cometidos en ocho localidades de la provincia de Zaragoza, ha informado hoy el Instituto Armado en una nota.

C.A.A. y R.M.D. fueron detenidos en el marco de la operación "Sisallete" como supuestos autores de numerosos robos cometidos en noviembre pasado en viviendas de las localidades de Cuarte, Cadrete, María de Huerva, Muel, Mozota, Botorrita, Utebo y Figueruelas.

La operación de la Guardia Civil se puso en marcha tras la oleada de robos sufridos en el interior de viviendas de esas localidades durante los últimos meses, con la puesta en marcha de una serie de dispositivos de vigilancia y reconocimientos de las zonas afectadas. La "laboriosa" tarea de investigación determinó que el 'modus operandi' llevado a cabo en la realización de estos delitos era similar.

Durante la tarde del pasado martes 24 de enero, agentes de la Guardia Civil del Puesto de Utebo apoyados por la patrulla NOC del Núcleo de Reserva de la Comandancia de Zaragora, sorprendieron 'in fraganti' a dos personas que se encontraban robando en una vivienda de la localidad de Figueruelas y procedieron a su detención. Tras las detenciones, los agentes de Policía Judicial efectuaron registros en los domicilios de los imputados, que dieron como resultado la recuperación de numerosos efectos sustraídos.

Los supuestos autores de los robos recorrían las urbanizaciones en busca de su objetivo en horario diurno controlando las viviendas, utilizando para ello siempre el mismo turismo y con unas características concretas. Por la noche regresaban al lugar y mientras uno de ellos esperaba en el interior del vehículo, el otro comprobaba que no se encontraba nadie en el inmueble, llegando en ocasiones, incluso, a llamar a la puerta para corroborarlo.

Una vez seguros de la inexistencia de gente en el interior, saltaban la valla y, tras forzar puertas o ventanas, accedían a la vivienda y sustraían diversos objetos. Se valían de guantes para no dejar rastro alguno y llevaban gorros para ocultar sus rasgos físicos.

En los registros domiciliarios se pudieron recuperar gran cantidad de objetos, como televisores, ordenadores, una impresora, portátiles, joyas, un revólver, armas blancas, linternas, herramientas, electrodomésticos, consolas de videojuegos, radiocasetes de vehículos, 'walkie talkies', maletas, etapas de potencia, un órgano, diverso material informático, perfumes y varias botellas de bebidas alcohólicas.

Los dos detenidos, que tienen su domicilio en Zaragoza y a quienes se les imputan 41 delitos de robo con fuerza en las cosas, serán puestos a disposición judicial durante las próximas horas, ha informado la Guardia Civil, que ha señalado que continúa la investigación para esclarecer los numerosos delitos con los que estas personas están relacionados.