La deuda del Ayuntamiento de Zaragoza ha pasado de 886,4 millones de euros a finales de 2014 a 759,8 millones en 2017, lo que supone 126,6 millones de euros menos, lo que ha situado el endeudamiento medio por habitante en 1.341 euros por persona.

Así lo ha detallado hoy el consejero Fernando Rivarés en la Comisión Especial de Cuentas en la que se ha dado cuenta de la situación económica del Ayuntamiento al cierre de 2017, informan fuentes municipales en una nota de prensa.

De forma paralela a la reducción de la deuda, se ha incrementado el gasto por habitante que se destina a servicios públicos o políticas sociales y que a finales del ejercicio pasado ascendía a 1.097,95 euros por persona, 80 euros más por habitante que en 2014 y 53,2 millones más en términos de toda la ciudad.

El esfuerzo inversor ha sido del 5 %, el más alto de los últimos años, según dichas fuentes que sitúan la inversión por habitante en 54,37 euros por persona.

Rivarés ha explicado además que 2017 se cerró con la cifra más baja de facturas pendientes de tramitar (la llamada cuenta 413) con 9,8 millones de euros pendientes frente a los 20,8 millones de 2014 o los 25,7 de 2015, mientras que el periodo medio de pago se ha situado en 6,16 días.

El consejero ha destacado que la mejora en la situación de las cuentas municipales ha permitido a Zaragoza salir del Plan de Ajuste cinco años antes de los previsto y poder destinar en 2018 parte de los 18 millones de euros de remanente a realizar inversiones financieramente sostenibles y no sólo a amortizar deuda.

Además, por primera vez en los últimos siete años la ciudad puede acceder a financiación externa para realizar inversiones.

La Comisión Especial de Cuentas ha dictaminado en contra de la Cuenta General de 2017, que ahora se someterá a exposición pública.