La Consejería de Sanidad admite la "compleja" situación en el servicio de Urgencias del hospital zaragozano Miguel Servet. Tal y como publicó ayer este diario, la saturación ha vuelto al centro desde el pasado domingo, cuando alrededor de una veintena de personas se vieron obligadas a pasar la noche en el pasillo ante la falta de camas.

Y las cosas no mejoraron ayer. De nuevo, cerca de 20 pacientes en el pasillo y una docena a la espera de una cama protagonizaron una situación que los propios profesionales calificaron de "caótica".

La preocupación habría llegado, incluso, a la gerencia del hospital, que, por otra parte, ha habilitado todos los espacios disponibles para responder a la gran demanda. Las tres salas de observación siguen llenas, así como la mayoría de los otros hospitales de la capital, lo que dificulta la derivación de pacientes.

Ayer, Oliván apuntó a los "elevados casos de gripe" como la razón principal del último episodio de saturación ya que, aunque se esperaba el pico de la epidemia hace quince días, esta se ha mantenido por el mal tiempo y "es normal que haya un impacto sobre las urgencias en todos los hospitales", apuntó.

En este sentido, el consejero informó de que "se están aplicando el cien por cien de los recursos y los sanitarios y la totalidad de las camas están abiertas, e incluso se ha incrementado el número de profesionales con carácter previo en previsión y a pesar de ello está el problema".

Aunque el número de afectados está alto frente a lo que es habitual, Oliván mostró su confianza en que se reconduzca y deje de tener gravedad, "principalmente de cara a las personas que tienen que esperar a ser atendidas o para llevarlas a planta" y añadió que "estamos haciendo todo lo posible y aplicando los recursos y las medidas de gestión a nuestro alcance".

Por su parte, los profesionales creen que la gripe no es la causa, sino el agravamiento de enfermos crónicos por problemas respiratorios.