El Consejo de Gobierno ha autorizado al Departamento de Desarrollo Rural y Sostenibilidad un gasto plurianual de 37,1 millones de euros para inversiones en materia de regadíos, cuyos beneficiarios serán las comunidades de regantes. En la rueda de prensa posterior a la reunión del Ejecutivo, el consejero de Presidencia, Vicente Guillén, explicó que los 37,1 millones se atribuirán a 25 anualidades de los presupuestos, desde el 2018 al 2042, con un primer importe de 1,1 millones y sucesivos de 1,5 millones.

Este tipo de ayudas fueron autorizadas por la Comisión Europea en noviembre del 2016, que las declaró compatibles con las directrices que fijaban ayudas estatales en los sectores agrícola y forestal y en las zonas rurales para el periodo 2014-2020. Ante el elevado coste de este tipo de actuaciones, la propia Comisión Europea autorizó que el pago material de la subvención pueda ser efectuado por esta administración hasta en 25 anualidades, a pesar de que la concesión deba hacerse en el marco de referencia de las directrices (2014-2020).

El establecimiento de este límite temporal, apuntan desde el Ejecutivo, se debe a que la amortización de los préstamos que contraen las comunidades de regantes para asumir este tipo de inversiones suele ser de 25 años. El procedimiento de concesión de las subvenciones a que se refiere esta primera orden de convocatoria se tramitará en régimen de concurrencia competitiva ordinaria, de acuerdo con los principios de publicidad, objetividad, transparencia, igualdad y no discriminación.

Por otro lado, la Comunidad Valenciana y la Región de Murcia se comprometieron ayer a sumar esfuerzos contra el actual «agravio» que sufren ambos territorios en materia de financiación autonómica, agua e infraestructuras, sobre todo el Corredor Mediterráneo. Así lo destacaron tras una reunión de más de una hora en Alicante los presidentes valencianos, el socialista Ximo Puig, y murciano, el popular Fernando López Miras, quienes destacaron el «nuevo camino de colaboración» entre ambos territorios, por encima de las diferencias por ser de distinto signo político.

FIRMA DE ACUERDOS

Puig y López Miras firmaron acuerdos en financiación, recursos hídricos e infraestructuras, que defenderán en los distintos ámbitos para tratar de corregir la actual situación que genera «desigualdad y falta de oportunidades» a los habitantes valencianos y murcianos.

Para Puig, «si la Comunidad Valenciana y Murcia tuvieran una financiación adecuada, tendrían un crecimiento superior al 4%», lo cual constituye «una realidad que genera una profunda falta de equidad y un problema para España». Insistió en que el sistema de financiación «debe nacer sobre la base de acuerdo» entre los territorios y los partidos políticos para «acabar con injusticia de anteriores modelos» y teniendo en cuenta «que haya una actuación sobre la deuda».

El agua es la segunda materia que más tiempo ocupó en la cumbre entre Puig y López Miras, materia en la que el valenciano recordó que estas dos autonomías «no despilfarran» y sí piden «un esfuerzo en infraestructuras y solidaridad entre comunidades para una calidad del agua que no pare el desarrollo» porque «aún hay posibilidades de crecimiento y de mejorar la capacidad de exportación».

El presidente murciano subrayó que el agua es una de las «herramientas» fundamentales para el desarrollo y destacó que el sector agroalimentario de su territorio utiliza el 3% del agua disponible para generar el 20% de las exportaciones españolas de fruta y hortalizas.