El Gobierno de Aragón contratará próximamente a seis personas que trabajarán en el equipo de la Dirección Provincial del Instituto Aragonés de Servicios Sociales (IASS) en Zaragoza con el objetivo de agilizar los retrasos en los pagos de dependencia y, al mismo tiempo, ayudar en la gestión de los trámites del Ingreso Aragonés de Inserción (IAI).

Estos trabajadores serán técnicos en auxiliar administrativo y también una enfermera, que se dedicará a "reforzar" la valoración que se hace a los dependientes que solicitan la ayuda una vez que el organismo ha detectado "cierto desequilibrio" en ese aspecto.

Estas seis personas tendrán un contrato de duración de dos años y trabajarán en la capital aragonesa, que es donde "más atasco" hay, según precisó a este diario Joaquín Santos, gerente del IASS. Pese a todo, la idea de la consejería de Ciudadanía y Servicios Sociales es que "a lo largo del año que viene" se incorporen personas a la dirección del IASS en Huesca.

"La intención es darle un impulso grande al tema de la dependencia. De momento, ya tenemos a 1.000 personas más atendidas de las que había, pero queremos hacer una gestión fuerte el año que viene en este apartado. Es uno de los grandes objetivos junto a la Renta Social Básica, que aún tiene que aprobarse en las Cortes", añadió.

CONTRATO DE DOS AÑOS

El gerente destacó que los retrasos del IAI "se han solucionado" y el trámite de las peticiones nuevas que llegan "se puede mantener" con los actuales trabajadores. Estas contrataciones se sumarán a las diez que ya se produjeron el pasado mes de septiembre en la sede del IASS y a quienes, según precisó Santos, se les ampliará el contrato por dos años, dado que en un principio su fecha de finalización era el 31 de diciembre.

"Pretendemos dar estabilidad laboral. Por ahora, estos 16 trabajadores son necesarios y es probable que muchos de los que llegaron a finales del verano pasen a tramitar los casos de dependencia, pero si volvemos a tener problemas en el IAI se reforzará esa sección", comentó el gerente del IASS.

Los varapalos en la aplicación de la Ley de la Dependencia en Aragón han sido constantes en los últimos años. De hecho, el Ejecutivo del PP dejó a la comunidad en el vagón de cola en cuanto a su capacidad de gestión. Desde el pasado 1 de enero, hay 7.500 personas más de grado moderado incorporadas a este sistema en la comunidad.

Esta es la principal razón --junto a la lista de espera de más de 6.000 retrasos-- por la que el Ejecutivo quiere reforzar la gestión y por la que, en los presupuestos del 2016 de la consejería de Ciudadanía y Servicios Sociales, ya se ha aumentado un 20% --unos 15 millones de euros-- la partida destinada a ayudas por dependencia en la comunidad.

"Voy a seguir siendo prudente, porque no hay un plazo para eliminar el lastre en dependencia que sufre la comunidad, pero sí que puedo asegurar que se le va a dar un importante empujón y me animo a afirmar que podemos acabar con la lista de espera", explicó Santos.