El Consejo de Gobierno aprobó ayer la modificación del acuerdo marco de plazas en centros residenciales para mayores dependientes y, de este modo, se crearán 200 más con el incremento de 553.368 euros al plan.
La consejera de Ciudadanía y Derechos Sociales, Mariví Broto, explico que el proyecto, válido para cuatro años, se aprobó en el 2014 por un importe de 63,03 millones de euros, distribuidos en cuatro anualidades.
Así, en el 2016 y en el 2017 se autorizó su modificación con un incremento de 2 millones y de 1,2, respectivamente, todo ello fruto de la reactivación de los mecanismos de reconocimiento de los mayores dependientes.
A esos incrementos se suma el acuerdo aprobado ayer, con lo que el número de plazas incluidas en el plan marco y que se concertarán es de un total 1.935, un 80% más que al inicio de la legislatura, cuando había 1.073.
El aumento de plazas supondrá crear puestos de trabajo, concretamente, en el Pirineo. Las plazas se irán cubriendo «de acuerdo con las peticiones que tenemos» desde entidades privadas y públicas gestionadas por los ayuntamientos y las comarcas en todo el territorio aragonés. «Lo lógico es que se repartan por todo Aragón», dijo Broto.
Estas 200 nuevas plazas irán destinadas para mayores dependientes, especialmente se llegará sobre todo a aquellos que tienen una valoración de grado III (grandes dependientes que no pueden valerse por sí mismos), que tienen una necesidad de recibir servicios «mayores».
A fecha de 31 de agosto, según los datos facilitados por Broto, en Aragón reciben prestación o servicio 27.788 personas dependientes —11.111 más que al inicio de la legislatura—, lo que según Broto requiere gestionar «de forma adecuada», dijo.
«Este Gobierno apuesta por los servicios en lugar de por la prestación económica para los dependientes», añadió la consejera. Se ha puesto mucho empeño en la gestión y en la dotación presupuestaria», reiteró la consejera Broto.
«En el limbo», añadió, de personas sin atender hay 5.925 personas, 8.500 menos que las que había cuando comenzó la legislatura, lo que representa una mejora «evidente y clara» de la situación.
