Una nueva fundación aragonesa (FundÍniciativas), integrada por expertos en varias áreas, ha elaborado un decálogo de medidas "radicales, pero necesarias" para hacer frente a la profunda crisis que sacude a Aragón. Entre la batería de ideas que plantea este colectivo, figura la puesta en marcha de un plan urgente de austeridad y reorganización presupuestaria, con el que la DGA conseguiría ahorrar entre 500 y 1.000 millones de euros (entre el 5 y el 10% del presupuesto autonómico). Unos recursos con los que se podría apoyar a autónomos, pymes y comerciantes; impulsar las energías renovales y los sectores económicos innovadores; y desarrollar un plan masivo de inversión en obras públicas y proyectos medioambientales.

"Hemos realizado un análisis departamento por departamento y euro a euro" durante los últimos meses dijo el presidente de la FundÍniciativas, César Ciriano durante su presentación a los medios. Y la principal conclusión es que aprobar un plan de austeridad, elevar el endeudamiento al máximo y aplicar nuevos impuestos y tasas "liberarían cientos de millones de euros" en Aragón.

Según expuso ayer, "hay departamentos que presentan un gasto corriente muy elevado", al tiempo que en los últimos años "se ha disparado el gasto de las empresas públicas". Así, la Fundación propone llevar a cabo una reforma admnistrativa y refundir estas empresas, cuyo gasto se eleva hasta los 700 millones de euros.

UN ´LOBBY´ SOCIAL Otro de los objetivos es crear un lobby que nace de la sociedad civil y transmitir sus ideas a los grupos parlamentarios (para que estos presenten proposiciones de ley), proponer ordenanzas y reglamentos municipales y celebrar jornadas abiertas a empresarios, sindicatos y partidos políticos. Se trata de poner en marcha una fábrica de ideas, apoyada en estudios y análisis sobre la realidad política, social y económica de Aragón.

La Fundación nace con su decálogo de medidas "fruto de muchos meses de trabajo y del análisis de un equipo de expertos".

Entre las propuestas presentadas por la Fundación destaca la aprobación de un decreto ley que obligue a las entidades financieras aragonesas a desbloquear el crédito para las empresas y particulares, que podrían disfrutar así de un sistema de avales y créditos inmediatos y evitar la asfixia financiera y los impagos.

En este Plan de 10 medidas urgentes frente a la crisis económica figura también la elaboración de un plan coordinado de todas las administraciones, un plan especial dirigido al sector de la construcción y al inmobiliario, la puesta en marcha de medidas para no dar tregua a la corrupción, así como la reducción de trámites burocráticos y la reforma urgente de la administración.