Dos días antes del inicio de la primera operación salida del verano, la Dirección General de Tráfico (DGT) ha publicado en su página web (www.dgt.es) la ubicación de 1.500 tramos de carreteras secundarias en los que intensificará la vigilancia de la velocidad con radares móviles por su especial peligrosidad con el objetivo de reducir la siniestralidad. En las vías de Aragón se anuncian un total de 139 radares: 89 de ellos serán móviles en tramos de carreteras secundarias en las tres provincias aragoneses, --29 en Huesca, 30 en Teruel y otros tantos en Zaragoza-- y el resto, fijos.

Estos tramos de vías interurbanas han sido identificados en función del número y gravedad de accidentes que se hayan producido y por la velocidad media detectada.

Su ubicación se hizo pública para general conocimiento de los conductores de forma que cuando transiten junto a ellos extremen las medidas de precaución y sobre todo cumplan con los límites de velocidad establecidos.

VELOCIDAD

Tráfico indicó que la velocidad es uno de los componentes fundamentales que determina la mayor o menor incidencia en la siniestralidad vial, la gravedad y el grado de lesión de las víctimas en caso de accidente y de ahí la importancia de controlarla de forma efectiva sobre todo en las vías convencionales, en las que el año pasado se registraron ocho de cada diez fallecidos. En concreto, cerca de 900 personas fallecieron el año pasado.

Por este motivo, Tráfico lleva centrando su actuación desde hace meses en este tipo de carreteras con medidas tales como la reubicación de radares a vías convencionales que antes controlaban autovías y autopistas y el plan integral de vigilancia que se puso en marcha en diciembre del pasado año y que tan buenos resultados arrojó, informó.

Así, la DGT publica ahora en www.dgt.es los 1.500 tramos de vías en los que temporalmente se intensificará la vigilancia a través de radares móviles.

Esta información la podrán consultar todos los conductores, así como los proveedores de navegadores que podrán dirigirse a la web para incluir en sus aplicaciones dichos tramos, de modo que se sume a la ya publicada sobre la ubicación de los radares fijos que tiene la DGT.

Los criterios para la identificación de estos tramos por su peligrosidad y de ubicación de los radares móviles, son el resultado de analizar el número de accidentes graves, con víctimas mortales o heridos que necesitaron hospitalización; el número de accidentes en general, y la información de la velocidad media de circulación en esos tramos. Además, los radares móviles serán visibles para los conductores, de modo que su presencia sirva como medida de disuasión y prevención.

Tráfico también recordó que los límites de velocidad son los fijados en la señalización. Por ejemplo, si en una carretera el máximo de velocidad es de 100 kilómetros por hora, la activación del cinemómetro será en 109, mientras que si está fijada en 120, el radar multará cuando se llegue a 131.