Un total de 15 socias y fundadoras de la Asociación de Madres Solteras o Solas (Amasol) presentó ayer su carta para ser dadas de baja y desvincularse de la organización que crearon hace 17 años por discrepancias con la actual junta directiva. Al parecer, dos empleadas que fueron contratadas el año pasado comenzaron a dirigir la asociación por su cuenta tomando decisiones sin informar ni tener presente la opinión del resto de socias. Se trata de una trabajadora social y de una psicóloga que, según la expresidenta de la asociación, Cristina Beltrán, «Han cambiado los valores, los estatutos, el gestor y hasta la junta directiva». Aunque la situación empeoró desde hace meses, las socias no quisieron desvincularse de Amasol hasta ayer para apoyar a una trabajadora que fue expulsada por las otras dos empleadas. Finalmente, la semana pasada consiguió demostrar que su despido fue improcedente.
