La Diputación Provincial de Teruel exigirá al Gobierno de Aragón soluciones «inmediatas y permanentes» con las que paliar la falta de médicos en el medio rural, tras hacerse pública estos días la reducción de los servicios sanitarios en algunas localidades turolenses.

Así lo acordaron ayer todos los grupos políticos de la corporación, en un pleno en el que firmaron una declaración institucional a propuesta del PAR, después de conocerse que serán los enfermeros quienes se hagan cargo de los consultorios médicos en ausencia de facultativos.

Esta situación afectará a varios núcleos de población, entre ellos Ejulve, Bordón, Estercuel, Molinos y las pedanías de Luco de Bordón, Dos Torres de Mercader, Abenfigo y Ladruñán.

«No es posible afrontar los retos que tiene esta provincia, como la falta de inversiones o la escasez de población, si no ofrecemos servicios de calidad y suficientes a nuestros vecinos», dijo el presidente de la institución provincial, Ramón Millán, a los medios de comunicación.

Por eso, calificó de «inaceptable que no se cuente con un servicio vital como es el médico de familia en los pueblos con una población tan envejecida», especialmente, destacó, cuando «se está hablando constantemente de paliar la despoblación», porque cuando llega el momento de «demostrarlo con hechos» no se hace.

Millán manifestó que el problema creado «debe de atajarse en su origen y no una vez originado» y propuso como solución que se tomen medidas e incentivos económicos, sociales y fiscales. Desde su punto de vista, las deficiencias en la asistencia sanitaria agravarán la despoblación del territorio.