La digestión de los enfrentamientos de ayer entre ciudadanos catalanes que querían votar en referéndum y las fuerzas de seguridad que lo impidieron ha llegado a Aragón con división de opiniones, pues mientras el Gobierno proclama la defensa de la legalidad, otros partidos de izquierda, como Podemos y CHA, piden la dimisión de Mariano Rajoy.
"La jornada más nefasta" de la historia de España desde 1981, en palabras del presidente, Javier Lambán, ha alcanzado al debate político aragonés.
Las posiciones de los partidos tienen un elemento en común, la apelación al diálogo, pero también matices y argumentos que los diferencian.
Lambán, quien ayer por la noche escribió en su cuenta de Twitter en defensa de la unidad de España y del Estado de Derecho, ha destacado hoy que ante una hipotética declaración unilateral de independencia, escenario probable dadas las pretensiones de la Generalitat y de la mayoría del Parlament, el Gobierno de Rajoy tendría "justificados todos los elementos legales a su disposición".
El presidente aragonés no lo ha mencionado, pero uno de esos instrumentos es la aplicación del artículo 155, que conllevaría incluso la intervención de la comunidad autónoma para que se cumpla la legalidad constitucional.
La Carta Magna plantea en dicho precepto dos pasos a dar si se atenta "gravemente" contra el interés general de España: el primero es el requerimiento a las autoridades autonómicas a regresar al marco legal; el segundo, consecuencia de no respetarse el primero, contempla la adopción de "las medidas necesarias para obligar" al "cumplimiento forzoso de dichas obligaciones".
Para Lambán, las vías de solución pasan por esperar qué hace la Generalitat durante los próximos días, pues si una de esas decisiones es la declaración de independencia, entonces el Estado tendrá que reaccionar.
"Un Estado que permitiera que una parte del mismo declarara su independencia de manera impune sería un Estado que no merecería ese nombre", ha resumido.
Empieza ahora, ha proseguido, la fase "más dura" de gestionar, pero ello no obstruye la necesidad de diálogo.
El presidente aragonés ve complicada esta opción, pero no la ha dado por inviable; antes, el Estado tendrá que reinstaurar la legalidad y a partir de entonces será "absolutamente imprescindible" la negociación.
En el PAR, la necesidad de recurrir al artículo 155, llegado el caso, es compartida. Su máximo dirigente, Arturo Aliaga, ha explicado que es un mecanismo recogido en la Constitución precisamente para aplicarlo en el supuesto de que un territorio rompa la convivencia y la unidad.
Pero entre los aliados del Gobierno aragonés las posiciones son otras.
Aunque es generalizada la preocupación por los enfrentamientos que se vivieron ayer en distintos puntos de Cataluña por un referéndum que el Tribunal Constitucional ha declarado ilegal, Podemos ha puesto el acento en la urgencia de que dimita Mariano Rajoy.
Desde Madrid, el responsable de Organización de Podemos y aún secretario general de este partido en Aragón, Pablo Echenique, ha hecho hincapié en la dimisión de Rajoy, pues tras lo de ayer se encuentra "inhabilitado" para encauzar el diálogo.
Para el dirigente de la formación "morada", el líder del PP es el "autor intelectual" de la violencia y el "comandante de la represión" policial de ayer en Cataluña.
Podemos Aragón ha incidido en esta línea al proclamar que, antes de recuperar el diálogo, hay que "remover" el principal obstáculo. Ese obstáculo, apunta la formación de Echenique, se llama Mariano Rajoy.
CHA, partido que forma Gobierno junto al PSOE, ha pedido a los diputados del Parlament de Cataluña que no declaren la independencia, pues una decisión así "dinamitaría todos los puentes" y supondría un "bloqueo en el modelo territorial".
Ahora bien, más allá de su oposición a esa supuesta declaración de independencia, el presidente de la formación aragonesista y consejero del Ejecutivo de Lambán, José Luis Soro, ha pedido también la dimisión de Rajoy.
El alcalde de Zaragoza, Pedro Santisteve, ha insistido en que el remedio a la tensión que ha impregnado Cataluña se disipará con un referéndum pactado.
Ha asegurado, además: "El Estado unitarista yo creo que ya se ha visto que no sirve, ni tampoco se puede imponer por la fuerza: el diálogo se tiene que imponer".
La representación del Gobierno estatal en Aragón también se ha pronunciado.
En sendas celebraciones de la Festividad de la Policía Nacional, la subdelegada del Ejecutivo en Huesca, María Teresa Lacruz, ha acusado a los responsables de la Generalitat de inspirarse en uno de los principios de los que se sirvió Joseph Goebbels en sus campañas propagandísticas a favor de los nazis.
Por su parte, su homólogo en Teruel, José María Valero, ha tildado de "Gobierno golpista" a la Generalitat al tiempo que ha defendido la actuación proporcionada de la Policía.
Fuera del ámbito político, el secretario general de UGT Aragón, Daniel Alastuey, ha lamentado a Efe el "fracaso" de la política tras ver las imágenes de ayer, en tanto que el presidente de CEOE Aragón, Fernando Callizo, ha considerado la jornada del 1-O una "sinrazón".
