Por tercera vez en apenas seis años, el diseño del futuro campo de fútbol de Zaragoza saldrá de nuevo a concurso. En esta ocasión, los terrenos elegidos para su emplazamiento serán los suelos de San José, junto al tercer cinturón, a la altura de la estación de cercanías de Miraflores. Lejanos quedan ya los millonarios proyectos de los arquitectos Ricardo Bofill para Valdespartera y de Carlos Lamela para el terreno de la actual Romareda. Los costes de los anteriores diseños --48 y 71 millones de euros, respectivamente-- parecen ahora insignificantes al lado de los 140 millones que necesitará este tercer y, quién sabe, si último intento.

El PP y el equipo de gobierno PSOE-PAR han pactado ya un acuerdo sobre la ubicación del campo al que también podría sumarse Izquierda Unida y al que la semana que viene intentarán atraer a Chunta Aragonesista. El teniente de alcalde de Urbanismo, Carlos Pérez, no ocultó ayer estar "bien contento" con la posición del PP.

Decidido ya el solar, ahora la principal duda a solventar es cómo pagar este propósito. "Hay que buscar dinero porque si no esto es una locura. No puedo contratar si no digo antes de dónde sale el dinero", reconocía ayer el primer teniente de alcalde, Fernando Gimeno, al ser preguntado por la firmeza del proyecto de la nueva Romareda presentado públicamente por el portavoz del PP, Domingo Buesa. "Si lo dice el PP, tiene grandes posibilidades", reconoció también Gimeno.

Aunque lo firmó hace solo unas semanas a cambio de su abstención en los presupuestos del 2008, el PP ha renunciado ahora "con gran dolor de corazón" a recuperar el proyecto de Bofill. Buesa argumentó ayer que "razones legales" le han llevado a este cambio de rumbo. El líder del PP indicó que el diseño de Bofill estaba pensado para un espacio en Valdespartera y que en San José podría haber problemas de movilidad por falta de espacio. Y, además, en mayo entra en vigor la Ley de Contratos del Sector Público y "no querría que ahora que hay voluntad política de acelerar el campo quedara bloqueado por la Justicia". Teme Buesa que el incumplimiento de la norma de contratos pudiese llevar a un recurso ante los tribunales que paralizase de nuevo el proceso, tal y como ya ocurrió con el estadio de Lamela en el 2006.

Según el PP, el campo se edificará en el sector 38/4 de San José, junto a la zona en la que se ubicaban los feriantes e Interpeñas en el Pilar. Es decir, en el área más próxima al tercer cinturón, pero no lejos del cuarto. La negociación apunta a que será un estadio con capacidad para 45.000 espectadores, que ocupará ocho hectáreas --cuatro de construcción y otras cuatro de anillo de seguridad--. Para ello, habrá que modificar varias manzanas del convenio urbanístico de Miraflores y los usos de los suelos que estaban pensados para equipamientos educativos. No quiso ser tan tajante Pérez Anadón sobre la ubicación exacta. "Hay que reubicar colegios y otros usos", explicó. Los populares hablaron incluso de construir una pasarela sobre el tercer cinturón que permita salvar el desnivel de terrenos.

En esta pastilla de suelo junto al tercer cinturón no hay sitio para el aparcamiento y la zona comercial y de ocio que se quiere construir junto al estadio y que también se gestionaría por la sociedad mixta que impulse el campo. Por ello, se ha pensado en un terreno cercano de uso terciario que tiene 15 hectáreas y está ubicado a 800 metros de distancia.

El portavoz del PP reiteró en varias ocasiones que este acuerdo es de 25 concejales --los trece del PSOE y los doce del PP--, llegando casi a olvidar a los dos ediles del PAR que sustentan una pata del equipo de gobierno municipal. Los populares quieren que el Ayuntamiento de Zaragoza sea el accionista mayoritario del campo, algo que no tiene tan claro Fernando Gimeno. "Estoy dispuesto a que la DGA tenga el mismo nivel de participación que el consistorio", dijo, al tiempo que insistió en la importancia de que el club y las entidades privadas también las pongan. PP y PSOE-PAR quieren que el suelo continúe siendo de propiedad municipal. Los populares, además, puntualizan que el ayuntamiento aportará el proyecto de ejecución, el suelo y el capital obtenido de la venta del solar terciario en Romareda --42.500 metros cuadrados pendientes de que se logre o no un acuerdo con las empresas adjudicatarias del proyecto de Lamela--.