Las carreteras aragonesas vivieron ayer una jornada negra, con dos jóvenes fallecidos y cinco heridos graves en dos siniestros distintos, uno en Caspe (Zaragoza) y otro en Moscardón (Teruel).

En el primero de ellos, un conductor de 28 años, de nacionalidad marroquí y vecino de Caspe, I. E., falleció en un accidente con tres vehículos implicados en la carretera A-221, entre Caspe y Maella, en el que también resultó herido grave un matrimonio, cuyo bebé salió ileso, y un tercer conductor sufrió heridas leves.

El siniestro, según fuentes consultadas, ocurrió sobre las 18.00 horas, cuando el vehículo del fallecido, un Audi de color rojo, perdió el control, aparentemente tras circular a gran velocidad, y terminó invadiendo el carril contrario y chocando con los otros dos.

El matrimonio, del que al cierre de esta edición no habían trascendido datos, resultó herido grave en la colisión, pero su bebé, que viajaba en el asiento trasero, salió ileso; en el tercer vehículo, un monovolumen de una funeraria de Alcañiz, solo viajaba el conductor y sus lesiones, pese al fuerte impacto frontal, no fueron de consideración.

Hasta el lugar se desplazaron patrullas de la Guardia Civil, de Protección Civil y una dotación de Bomberos de la Diputación Provincial de Zaragoza desde Caspe. A los cuatro de la dotación acabaron uniéndose otros seis que estaban fuera de servicio, pero que ante la gravedad del siniestro no dudaron en incorporarse al operativo y ayudar en la excarcelación de los heridos, destacaron fuentes de la Diputación de Zaragoza.

De hecho, en un primer momento lograron extraer al joven caspolino con vida, pero sus lesiones eran críticas y, pese a que acudió el helicóptero del 112, no se pudo hacer nada por salvar su vida. Los heridos fueron trasladados a diversos hospitales con las tres ambulancias desplazadas hasta el lugar, en el kilómetro 66 de la A-221, y en principio no se temía por su vida.

AUMENTO / El segundo siniestro se registró poco antes de las seis de la tarde en la carretera local TE- V-9113, que conduce a Moscardón, en la sierra de Albarracín. Un turismo se salió de la vía por el lado derecho y colisionó con un árbol de grandes dimensiones. Falleció en el acto C. G. D., de 30 años y vecina de la citada localidad. Los heridos graves fueron dos menores y R. M. A., de 35 años, todos ellos residentes igualmente en el pueblo turolense.

Con el de ayer, las estadísticas de la DGT reflejan 24 víctimas mortales en las carreteras de la comunidad aragonesa desde que empezó el año. Son tres fallecidos más que los que se contabilizaban en el 2016 a estas alturas.