La Diputación de Zaragoza convocará el próximo vienes, 1 de septiembre, el Plan Unificado de Subvenciones, tres meses antes que en 2016, con el fin de adelantar la tramitación y que pueda aprobarse a continuación del presupuesto de 2018 y empezar a transferir el dinero a los ayuntamientos a principios de año.

Ésta es una de las novedades que presenta esta nueva edición del Plan Unificado de Subvenciones (PLUS), dotado con 50 millones de euros anuales, y que se puso en marcha el año pasado para agrupar la casi treintena de planes con los que contaba anteriormente la institución.

Otras de las novedades es que la convocatoria incluye una parte de concertación de 3,5 millones de euros, 12.000 euros fijos por entidad local, que los ayuntamientos recibirán directamente y sin finalidad, para que puedan imputar allí cualquier gasto que no entre en las líneas subvencionales o que todavía no tengan previsto, ha informado la DPZ en un comunicado.

El resto, los 46,5 millones de euros, se distribuirán como en la edición anterior -el 40 % a través de un fijo igual para todos y el 60 % restante en función de la población que tiene cada uno- de forma que se establecen unos 63.000 euros fijos por población, y unos 96 euros por habitante.

Una distribución matemática con la que se pretende acabar con la discrecionalidad y garantizar unos servicios e infraestructuras mínimas en todo el territorio, tal como ha señalado el presidente de la Diputación de Zaragoza, Juan Antonio Sánchez Quero.

"Antes el presupuesto de la institución provincial encorsetaba el de los municipios, con el PLUS son los presupuestos de los municipios los que condicionan el de la Diputación", subraya Sánchez Quero.

Otras de las mejoras es que se abre una nueva línea subvencionable para el gasto corriente de urbanismo (redacción de memorias, informes y proyectos) y que el periodo computable para el Plan de Empleo será desde enero hasta diciembre del 2018.

Por otro lado, en lo que respecta a la tramitación, además de adelantarse la convocatoria, se pretende agilizar aún más el procedimiento.

Así, se ha simplificado la solicitud, de modo que cualquier error respecto a la aplicación en la que se imputen las actuaciones solicitadas se solucionará de oficio por parte de los servicios de la Diputación de Zaragoza; y se establece una prelación en las solicitudes, para que si algún ayuntamiento solicita más dinero del que le corresponde, pueda solventarse también de oficio siguiendo la prioridad de los ayuntamientos.

De esta forma se espera reducir el número de requerimientos que tuvieron que cursarse en la primera edición del plan.

La convocatoria del DPZ PLUS, que estará abierta hasta el próximo 2 de octubre, repite la fórmula del año pasado, que recibió una respuesta satisfactoria unánime de los responsables municipales, tal y como se puso de manifiesto en el foro de alcaldes en el que se presentó hace casi un año, y volvió a ratificarse en el foro celebrado a comienzos de este verano, según las fuentes.

Precisamente las aportaciones de los responsables municipales han servido para mejorar este plan que, como ya adelantó Sánchez Quero, ha supuesto "un cambio histórico en la relación entre la DPZ y los ayuntamientos" ya que ha permitido dotar a las entidades locales de más autonomía al ajustarse a las necesidades de cada municipio y también de más previsión

La mitad de los fondos se destinaron en la pasada edición del plan a prestar servicios públicos básicos y entre ellos destacó la pavimentación de calles, abastecimiento de agua y alcantarillado (que supondrán el 27,1 % del total de los fondos del PLUS); alumbrado público (6,7 %); seguridad y orden público (6,6 %); limpieza viaria (4,1 %); cementerios y servicios funerarios (2,1 %); y parques y jardines (2 %).