El Departamento de Educación analiza ya los diferentes modelos de gratuidad de libros de texto existentes en otras comunidades de cara a su futura implantación en Aragón. La iniciativa de la Administración se encuentra actualmente en fase de estudio, lo que implica el análisis de modelos y reuniones con colectivos implicados. De hecho, ya se ha producido una primera toma de contacto con algunos de ellos, si bien las reuniones formales con padres o libreros se celebrarán antes de fin de año.

Con las aportaciones y conclusiones extraídas de esos encuentros se procederá a la fase de diseño del modelo que se implantará en la comunidad. Uno de los sistemas que se está valorando es el que aplicará Madrid el próximo curso. Se trata de un modelo por el que las familias podrán acceder a los libros y ceder los del curso ya acabado para otras familias. Así, los padres interesados deben comunicar ahora que quieren participar en el sistema y, en junio, tendrán que entregar los libros del curso recién concluido en perfecto estado. Este material se destinará a otras familias y las que lo hayan entregado recibirán los libros del curso que comenzará su hijo.

El Departamento de Educación en Aragón ya ha apuntado en numerosas ocasiones que será un sistema de préstamo progesivo, algo que satisfaría al colectivo de libreros. «Lo que pedimos es ser parte colaboradora y activa y que no se nos salten para acudir directamente a las editoriales. Aceptaremos el sistema que sea más adecuado para las familias y para la Administración, aunque creemos que el más lógico sería el de préstamo de libros de forma progresiva», indicó Óscar Martín, vicepresidente de la Asociación de Libreros de Aragón.

En este sentido, el colectivo entiende que este modelo sería «el más sostenible» tanto para los presupuestos de la Administración como para los propios libreros, a los que permitiría «vender algo» cada año.