La Plataforma de Padres por la Escolarización en la Romareda protagonizó ayer una cacerolada a las puertas del Departamento de Educación contra la consejera Mayte Pérez y en reclamo de la apertura de una vía más en el barrio.

Padres, madres, niños y familias de otros colegios apoyaron la protesta con ollas y pitos en mano. Sin embargo, pese a su ruido y después de la reunión que ya mantuvieron el lunes con Educación, la DGA mantiene que no abrirá una vía más en el colegio Cesáreo Alierta, que es lo que reclaman esta plataforma.

«Somos 28 familias que pedimos una solución porque, con un aula más, no tendríamos que llevar a nuestros hijos fuera del barrio. Van a a abrir una más en el Azúa y en el nuestro no», explicaron fuentes del colectivo.

Por parte del departamento se apuntó que «todos los alumnos de Romareda que cumplen el requisito de proximidad tienen plaza. Con la apertura del aula en le Azúa y las vacantes en los centros públicos próximos tendrán plaza», señalaron desde la consejería. En el caso de los alumnos que no tengan el requisito de cercanía, «Educación estudiará las opciones que han puesto en su solicitud», añadieron.

En este sentido, desde la plataforma de padres indican que «para muchas familias se les darán plaza en sextas y séptimas opciones», que ya no están en el barrio. «Vamos a pedirles a los padre que no matriculen en los centros que les dicta la DGA y a ver si conesguimos algo. Tenemos la esperanza de lograr una solución, aunque sabemos que el plazo termina», precisaron desde el colectivo. También están recogiendo firmas y han enviado una quejda al Justicia de Aragón.