Más de una cuarta parte de la población aragonesa (el 26,63%) usó alguno de los servicios de atención a urgencias durante el año 2006, tal y como revela la Encuesta Nacional de Salud de ese año que ayer difundió el Instituto Nacional de Estadística. En concreto, y según la población de la comunidad, 333.000 ciudadanos precisaron algún tipo de asistencia de urgencia y casi el 70% de ellos la recibió antes de una hora, aunque, en el otro lado de la balanza, se registró un 9,23% de personas que tuvieron que esperar tres horas o más.

La tendencia aparente de que cada vez más población utiliza estos dispositivos no está respaldada por los datos de este estudio, ya que en el 2003, fecha del anterior sondeo, fueron un 27,48% los aragoneses que recurrieron a ellos (un 0,85% más que en los últimos datos).

En la investigación se pone de manifiesto también cuánto tienen que esperar los usuarios para ser atendidos de una dolencia urgente. Una tercera parte de los pacientes aragoneses recibe asistencia en menos de 15 minutos; un 17% de 15 a 30 minutos y el mismo porcentaje debe aguardar de media a una hora para ser atendido. El 23,64% de los que precisaron estos servicios tuvo que esperar de una a dos horas y un 9,23%, tres horas o más.

Respecto a dónde se prestó la asistencia, seis de cada diez pacientes acudieron a un hospital público mientras que el 26% lo hizo a otro centro sanitario, aunque también del sistema. En conclusión, más de las tres cuartas partes de los usuarios apostaron por el sistema público de salud, mientras que solo el 12,63% de los usuarios recurrió a un dispositivo privado y el 0,92% a otros servicios.