El Comité de Empresa de TUZSA ha denunciado que la empresa está "intentando torpedear" la negociación del convenio colectivo y que, además, está coaccionando a parte de la plantilla con sanciones "por el mero hecho de haber secundado los paros parciales".

En una nota de prensa, el presidente del comité, Javier Anadón, recuerda que desde el pasado 1 de julio, fecha en la concluyeron los paros parciales convocados como protesta por la paralización de la negociación, la dirección de la empresa concesionaria del transporte público de Zaragoza y la representación de los trabajadores se han reunido en cinco ocasiones.

Pero, según Anadón, la dirección ha comunicado a diversos conductores "sanciones de faltas muy graves con 15 días de empleo y sueldo".Y también ha avisado al comité empresa de que el secretario habitual que redacta las actas de la comisión negociadora del convenio está de vacaciones hasta final de agosto y que "no lleva intención de que sea sustituido por otro".

Para el comité, estos hechos son "claros exponentes de que TUZSA por un lado quiere coaccionar a la plantilla por haber ejercido su derecho constitucional a la huelga y por otro demuestra claramente su nula voluntad negociadora".

Ante ello, el comité de empresa ha solicitado el amparo del Servicio Aragonés de Mediación y Arbitraje (SAMA) para que durante este periodo proporcione a una persona que realice las funciones de secretario de actas y así se garantice la continuidad de las reuniones.

No obstante, "a pesar de estas desafortunadas y provocadoras acciones de la empresa", el comité de empresa ha presentado a la dirección una nueva propuesta de rotaciones y descansos para la sección de mantenimiento, "con el objetivo de alcanzar acuerdos y desbloquear la negociación del resto de puntos de la plataforma reivindicativa", puesto que para TUZSA es primordial este punto para avanzar en la negociación.

La próxima reunión esta prevista para el 18 de agosto, y el SAMA ha comunicado al comité que está estudiando el asunto y que contestará en breve "con el fin de garantizar que no se rompa el proceso negociador", concluye Anadón.