La vía natural de comunicación entre Cuarte de Huerva y Zaragoza es el camino de la Fuente de la Junquera, que discurre por la margen derecha del afluente del Ebro. Sin embargo, esta ruta ha quedado postergada por la N-330 y la autovía Mudéjar, que soportan casi todo el tráfico y discurren por el otro lado del río. Ahora el Ayuntamiento de Cuarte se propone desenterrar un antiguo proyecto para convertir la pista en una carretera que facilite el acceso a los polígonos industriales y las urbanizaciones que jalonan esta ruta alternativa entre la capital aragonesa y las poblaciones atravesadas por el Huerva.

"Sabemos que el momento económico no es el más adecuado para este tipo de proyectos, pero el actual camino asfaltado, además de insuficiente, resulta peligroso", apuntó ayer el alcalde de Cuarte de Huerva, Jesús Pérez.

De hecho, la pista de asfalto resulta estrecha y presenta un trazado muy deficiente, lo que no impide que sea utilizada a diario por gran número de vehículos. Sencillamente, para muchos trabajadores y residentes el camino de la Fuente de la Junquera es un atajo que merece la pena tomar porque ahorra tiempo y combustible.

"El Ayuntamiento de Zaragoza ponía pegas porque temía que el tráfico saliera de la ciudad por la orilla del canal Imperial, pero en el proyecto que nosotros manejamos existe un ramal que conduce desde el Huerva hasta el Tercer y el Cuarto Cinturón pasando por el Tiro de Bola, en la parte de atrás de los Pinares de Venecia", aseguró el alcalde de Cuarte.

"Para nosotros se trata de un proyecto prioritario, pues el camino enlaza numerosas industrias y zonas residenciales", continuó Jesús Pérez.

La obra se ha encontrado con cierta oposición por parte de las asociaciones ecologistas, que consideran que una carretera ancha y muy transitada tendría un impacto negativo sobre la ribera del Huerva. Pérez, en cambio, considera que la nueva vía no perjudicaría al entorno e incrementaría la seguridad de quienes la recorren en automóvil. E. P.