El Gobierno de Aragón comenzará a finales de este mes con la adjudicación de las viviendas de alquiler social. Ya se han recibido 1.017 solicitudes, según adelantó ayer el consejero de Obras Públicas, Rafael Fernández de Alarcón. Precisó sin embargo que el 40% de ellas no cumplen con los requisitos, y por lo tanto se quedarán fuera del proceso.

El Ejecutivo autonómico creó hace unos meses una bolsa de vivienda social a la que se han ido sumando municipios de toda la comunidad, además de diferentes organizaciones sociales. Una vez completada, se abrió el proceso para que los aragoneses pudiesen remitir sus solicitudes. El consejero explicó que en estos momentos cuentan con cuentan con 338 viviendas --206 en Zaragoza, 51 en Huesca y 77 en Teruel--. Algunas no han sido aceptadas porque eran "inadecuadas". Fernández de Alarcón expresó su deseo de que este número aumente "cuando los propietarios vean que las cuidamos", con el objetivo de alcanzar los 800 pisos.

El titular de Obras Públicas ofreció estos datos en respuesta a una interpelación parlamentaria formulada en el pleno de las Cortes de Aragón por el diputado del PSOE, José Ramón Ibáñez. Fernández de Alarcón señaló que de las 351 solicitudes de Zaragoza, 217 cumplen requisitos, 16 son personas desahuciadas, 14 víctimas de violencia de género y 35 discapacitados, para señalar quieren "favorecer sobre todo a desahuciados".

Adelantó que este lunes lunes, "probablemente, tendremos un convenio" con la Fundación Federico Ozanam para colaborar en la gestión social de 140 viviendas. Ahora "ya gestionan con nosotros 14 viviendas". Respecto a la rehabilitación, avanzó que se gastarán los 1,3 millones de euros consignados.