El hospital Miguel Servet de Zaragoza ya cuenta con la acreditación para poder realizar trasplantes de riñón cruzado, una modalidad que ofrece a pacientes con insuficiencia renal crónica la posibilidad de recibir un trasplante de riñón de donante vivo, gracias a la generosidad de un familiar, aunque este no sea compatible.

"Hay un porcentaje de parejas de donante receptor que tienen un problema de donación directa, pero ahora podemos buscar compatibilidad entre parejas y cruzar ambos riñones para que ambas salgan beneficiadas", explicó ayer Álex Gutiérrez, responsable médico del programa de trasplante renal de donante vivo en Aragón.

Desde el Miguel Servet estiman que la primera intervención de riñón cruzado en el hospital aragonés se realizará antes de que finalice el año. "Nuestra previsión es actuar a muy corto plazo, a ser posible en este 2013. Ya estamos evaluando candidatos para iniciar el proceso", añadió Gutiérrez.

Esta modalidad de este tipo de trasplante se contempla en los casos en los que un paciente que ha comenzado una evaluación de un donante vivo no encuentra compatibilidades inmunológicas entre los familiares de su entorno que se han ofrecido a donar el riñón. En esos casos, se informa a la familia y al paciente de esta posibilidad de trasplante cruzado.

Cuando se encuentran coincidencias, el familiar de uno de los enfermos dona su riñón al otro paciente, a quien no conoce. El gesto solidario se repite de forma cruzada entre el otro allegado y el otro enfermo renal. "Los resultados son inmejorables", matizó Gutiérrez.

El hospital Miguel Servet se une así a los 21 hospitales de España que ya practican esta intervención. "Estamos muy satisfechos. Poner todo esto en marcha supone un gran esfuerzo logístico, ya que coordinar dos intervenciones de forma simultánea requiere unas condiciones que ahora ya cumplimos", puntualizó el responsable médico.